Go1 es el Dios de la Destrucción en Dragon Ball FighterZ

Cell da dos pasos ante Goku y de golpe, salta hacia el otro lado para intentar romperle la guardia. Quién haya jugado a Dragon Ball FighterZ sabe que caminar en la cara del enemigo es poco habitual. Frenético, ofensivo y buscando siempre el hueco que deja la defensa contraria, esta anécdota define buena parte de la final entre Go1 y Fenritti. Ambos del mismo equipo. Ambos entrenando día a día. Se conocen tanto que el Cell de Fenritti pudo dar tres pasos ante Goku GT sin que este reaccionara. Simplemente esperaba. Hubo dos o tres pausas, que no son ni de un segundo pero que en un combate de FighterZ parece una eternidad, donde ambos jugadores procesaban tantas opciones sobre lo que iba a hacer el otro, que dejaban estos pequeños instantes. Fue una final tan atípica como espectacular que, eso sí, se llevó el favorito: Go1.

Go1 le clavó un perfect y todo el mundo pensaba que sería un paseo. Hay veces que el japonés parece invencible, con un equipo imbatible y una defensa sin fisuras. Pero si algo sabía París es que Fenritti era el único que lo conocía lo suficiente para superarlo. Y la respuesta fue más inesperada que ver un perfect en unas finales: otro perfect. 1-1. Este, además, tuvo un sabor añejo, con un Cell y un Vegeta SSJ que fueron los reyes durante el primer año de juego, y que ahora pocos se ven salvo en manos de un Fenritti que exprime el máximo daño posible en cada ocasión. Da gusto verle.

El renacer de Cell y Vegeta ante el Dios de la Destrucción

Cada 2H de Cell resuena como una patada a todos aquellos que creen que el juego solo es viable con los personajes de siempre. Fue uno de estos patadones en un air-dash de GT cuando presionaba en esquina que le dio el 1-2 a Fenritti, quitándose la presión, matando en el combo a GT y luego acabando con el tercer personaje de Go1. El reinicio de la final estaba cerca.

Go1 no se puso nervioso. Donde Cell alargaba sus combos con la inestimable ayuda del assist de Vegeta (¡Decían que ya no sería nunca útil!), Goku GT hacía lo que sabe, generar impotencia; y Bardock, lo de siempre con Go1: aprovechar cada hueco para dañarte todo lo que pueda. Se lo llevó Go1 tras algún error sorprendente de Fenritti. Quedaba un último combate, y ahí el campeón del EVO demostró su nivel, dominando con claridad, matando un personaje y medio de Fenritti sin casi haber recibido daño. Hubo un pequeño momento para la esperanza: Go1 falló un TOD y lo aprovechó Fenritti para voltear la partida... Pero apareció GT de nuevo. Combo, Genkidama, Dragon Rush y tres levels 1 para dejar a Fenritti solo con Vegeta. Ya no tenía nada que hacer. Go1 es el Dios de la Destrucción en FighterZ. Veremos en la tercera temporada.

Por el camino quedaron un Tachikawa que consiguió top 8 viniendo del LCQ, un Deskillage que lo tuvo cerca pero no pudo contener las lágrimas tras caer con Fenritti en la final de losers y otros en el Top 8: Matoi, Maddo,

Competitivo + Dragon Ball: una puesta en escena de otro nivel

Con Dragon Ball todo es más especial. La puesta en escena en París de la mano de Red Bull es otra historia. El setup, como el Torneo del Poder. A los cuatro costados, lonas que recreaban escenarios. Cuando entraban los jugadores, la banda sonora de la serie (gracias a Dios que se ha recuperado para los videojuegos desde hace un tiempo). Cuando un personaje prepara la Genkidama, todo el público levanta las manos. Cuando Gohan se transforma, todos gritan con él. Cuando chilla Cell, todo el escenario se cae. Y en los vídeos, secuencias de Goku y Jiren luchando en el anime, como antesala del anuncio que llegaba de la temporada 3. El campeón Go1 invoca al dragón al final, que aparece por todas las pantallas, para dar paso al tráiler de nuevos personajes.

FighterZ es puro Dragon Ball, y el World Tour ha sabido trasladarlo in situ. Poder vivir competiciones con la serie con la que crecimos parecía una quimera no hace tanto tiempo. Concretamente, antes de 2018. Y la propia historia de FighterZ seguirá con lo que está por venir. De hecho, es tan Dragon Ball que de la misma manera que la historia de Goku y Vegeta no ha terminado, la de Go1 y SonicFox todavía está por escribir. Y está bien decirlo: ellos han mantenido vivo el juego cuando peor ha estado. Aunque les tocará vigilar porque cada vez hay más contrincantes de nivel. Se ha visto en París.