Dragon Ball: Xenoverse, guía completa - Saga Bills, dios de la destrucción

El poderoso Bills, Dios de la Destrucción.

La que se ha liado por un pastel… Has de esperar que Bills ataque primero, de lo contrario te enganchará y te atizará sin contemplaciones.

Espera a que tus aliados lo agoten y rompan su defensa, para luego acercarte tú y atacarle por la espalda. El combo con BOTÓN TRIÁNGULO es el más efectivo de todos si lo haces hasta el final, es decir, hasta la patada en picado. Espera a que se levante y usa el Kamehameha para aturdirlo aún más. Acércate planeando hasta él, sitúate muy cerca de su posición, y no esperes a que se levante y huya: usa el ataque definitivo más dañino que tengas para hacerle caer todavía más.

Fíjate que la barra de salud de Bills está primero naranja, y luego pasará a rojo. La naranja solamente es su coraza, por lo que te espera un combate largo en el que prima más la estrategia que el ataque.

¿Qué trama Demigra? Detén a Bills.

Suscribimos los mismos consejos del anterior enfrentamiento contra Bills, sólo que ahora debes mantenerte al margen también hasta que Dios Súper Saiyan Son Goku le realice la versión más letal del Kamehameha. En ese instante será tuyo, y podrás atizarle con un buen combo de ataques fuertes (BOTÓN TRIÁNGULO) y un ataque definitivo con toda la barra de ki.

Bills vuelve a tener esa especie de coraza, por lo que la paciencia y el saber cuándo atacar vuelven a ser tus mejores aliadas.

¡Únete a Bills! ¡Acaba con Demigra!

Pese a que Demigra tiene también su correspondiente coraza, podrás atizarle cuerpo a cuerpo sin problemas. No es tan resistente como Bills, aunque es tremendamente ágil. Eso sí, debes evitar su ataque definitivo de cualquier manera, pues te restará más del 60% de la barra de salud si te alcanza.

Si vas a lanzarle algún ataque definitivo, que sea a distancia media: si lo haces muy cerca lo bloqueará, y si lo llevas a cabo demasiado lejos, ni le afectará.

¡Hora de una prueba! Bills y Whis.

Es uno de los combates más duros de todo el juego… y es sólo un entrenamiento.

Como es muy probable que te resulte verdaderamente imposible a las primeras de cambio, te recomendamos completar antes hasta la misión secundaria número 35 para ir sobre seguro. Si apenas has evolucionado tu nivel (cosa que nos extrañaría, pero para algunos más vale maña que fuerza), completa hasta la misión secundaria número 40 para no encontrarte problemas en este enfrentamiento ni en los que vendrán después.

Pese a que fijes a Bills o a Whis, ambos os atacarán indiscriminadamente. El planeo lateral es una gran baza, y si has ido usando los puntos de habilidad para mejorar tu resistencia, es aquí donde agradecerás haberlo hecho. Para los que no, id ascendiendo y descendiendo mientras voláis para que no os aticen.

Whis tiene la manía de no dejar de perseguir al que vuela, por lo que estás muerto si te paras. Sus ataques definitivos HAY QUE EVITARLOS a toda costa. Evita lanzarles ráfagas y usa la siguiente estrategia: planea nada más empezar el combate, fija a uno de tus enemigos y vuela en círculos sobre él. Si se detiene, usa el Kamehameha y huye corriendo antes de que te aticen ambos. Espera a tener llena tu barra de ki y usa la lluvia de meteoritos o los discos aturdidores desde MUY CERCA para que les afecte lo máximo posible.

Mientras realices un ataque definitivo, el otro contrincante te atacará y te restará algo de salud. Ni que decir tiene que debes venir al combate equipado con tres cápsulas de curación y una de ki completo…

¡Caos total! Choque de rivales.

El enfrentamiento es bastante duro debido a que te enfrentas a uno de los rivales más molestos de todo el juego, Bu, pero en su versión cría, que es más ágil e igualmente resistente que el propio Monstruo Bu.