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Los videojuegos como calmantes
Jugar calma a los niños antes de las operaciones.
En un hospital de Nueva Jersey se dieron cuenta hace poco que dejar jugar a la Gameboy a los niños los calmaba mucho mejor que una dosis de calmantes, y los preparaba para la operación. El efecto de la partida liberaba tensiones y disolvía el estrés mucho mejor que los anestésicos, sin que surjieran efectos negativos. "Un niño que juega es un niño feliz que se olvida de lo que le rodea, y olvidarse del lugar en el que se encuentra, un hospital, es el mejor calmante antes de una operación" afirma el Doctor Anu Patel, anestesista del Hospital Universitario de Netwark. Según Patel, los juegos sirven también de ayuda a los padres que no saben cómo distraer la inquietud de sus hijos en la sala de espera. "Desde hace tiempo se habían probado otros métodos de distracción, como escuchar música o ver la televisión, pero ninguno había obtenido tan buenos resultados al no exigir una atención constante". Según un estudio sobre 25 niños, midiendo los niveles de ansiedad en una escala de 100 y tomando como partida el jugar, es decir 0 puntos por entretenerse con la consola, ofrecer un tratamiento de anestésicos proporciona 7,5 puntos más de ansiedad, y estar en compañía paternal 17,5. Los pediatras americanos empiezan a plantearse que este método sea estándar.