Las locas aventuras de los Lionheart

Cuatro de los antihéroes más surrealistas que la imaginación humana haya concebido, están a punto de reunirse para iniciar una peligrosa aventura en busca de un poderoso libro que cayó en las manos menos apropiadas, y que les devolverá su reputación perdida. Ellos son los Lionheart.

Los carteles de Se busca se encuentran por doquier con los rostros de todos los miembros de la banda impresos en ellos. Pero eso no es una traba apara que tres de sus miembros (el imponente robot, Q; el topo experto en explosivos, Jonsey; y el líder de la banda, Rome) se adentren en las heladas llanuras de Bergog en busca del cuarto miembro del grupo, un viejo ciego de muy malas pulgas, Rexus.

Aquí empezará nuestra aventura, y nuestra primera misión será la de rescatar sano y salvo al cuarto integrante de los Lionhearts para que pueda acompañar al resto en la loca aventura que nos aguarda a lo largo de las numerosas fases que compone este juego, y en las que tendremos que llevar a cabo todo tipo de misiones.

En muchas ocasiones, sobre todo con los magníficos diálogos de los videos que se nos mostrará tras la conclusión de cada fase del juego, se nos asemejará el juego a una de esas comedias cinematográficas basadas en las conversaciones y situaciones surrealistas en las que uno no puede dejar de reír. Un genero éste, desenfadado y sin complejos,  que debería prodigarse en nuestras consolas.

Esta es la gran diferencia entre los buenos juegos y esas obras maestras que marcan una época. Por supuesto no nos referimos a la calidad gráfica, si no a ese equilibrio en el que todo función más o menos al mismo nivel, y el hecho de que uno de los muchos apartados que deben cuidarse durante el desarrollo sea excepcional, no afecte de manera directa a la calidad de los demás.

Entorno que cuenta con una variedad bastante surtida de texturas, aunque estás no sean todas de la calidad que hubiéramos deseado. Muchas de ellas resultan demasiado difuminadas y borrosas y hacen que la sensación de detallismo quede igualmente difuminada. Este problema afecta tanto a los escenarios como a personajes que, a pesar de que somos conscientes que el realismo no era el objetivo, da a los personajes un aspecto casi de dibujo animado.

Esto se ve acompañado sin duda alguna por un modelado bastante deficiente en el que casi podemos contar a ojo el número de polígonos empleados, aunque esto se ve paliado por el tipo de cámara empleada (en tercera persona pero bastante alejada) por lo que será en los videos que veremos entre misiones en los que más nos llamará la atención este tipo de defectos.

Por eso no entendemos como algo tan importante puede haberse cuidado tan poco en el apartado técnico. Los videos de Armed & Dangerous presentan un aspecto anticuado y de baja calidad. Realizados con toda probabilidad con el mismo motor gráfico del juego, deja a la vista todos los defectos del motor que no pueden contemplarse a simple vista durante el juego, como lo limitado de los detalles en el modelado de los personajes, el acabado insuficiente de los mismos y por supuesto el uso de texturas nada apropiadas para este tipo de videos.

Si bien el uso de algunas texturas deficientes durante el juego (ni mucho menos todas lo son) puede argumentarse por la enorme amplitud de algunos de los escenarios que presenta o incluso por los numerosos enemigos que pueden darse cita con tu personaje durante una misma batalla, cosa que carga la memoria en exceso. Aún así, nuestra consola está preparada para eso y mucho más.

Y aunque los videos tengan un aspecto poco acorde con los vistos en otros juegos de su generación, son sin duda uno de los puntos fuertes del juego, hasta el punto de que desearemos acabar las fases para desternillarnos con las ocurrentes frases y situaciones provocadas por los cuatro miembros de este peculiar grupo de forajidos.

A medida que avancemos en el juego iremos dándonos cuenta que es un juego de contrastes en el que  podemos ver cosas bastante conseguidas, como el efecto del zoom del rifle franco tirador, y otras como el caso del efecto del agua que parece sacado de un juego de muchos años atrás.

Las voces de los personajes son las originales, por lo que las escucharemos en perfecto inglés, y aunque orgullosos de nuestro idioma nos ofenda no recibir todos los productos traducidos, hay que reconocer que como en el cine, un mal doblaje perjudica más a una buena película que el incordio de tener que leer los subtítulos.

La suficiente variedad a la hora de entrar en acción hace que este juego no caiga en el error de otros títulos de acción que comienzan pareciendo una obra maestra y el tiempo y el tedio hacen el resto para conseguir que queden olvidados en nuestros cajones tras cuatro o cinco fases de juego. Pero, vayamos por partes...

Podremos participar en misiones de varios tipos desde el comienzo del juego. Las más comunes al principio se basarán en la infiltración en zonas llenas de enemigos en las que (ayudados o  no de nuestros compañeros - hay misiones en solitario, y otras en compañía de Q, Jonsey e incluso Rexus-) deberemos situar unas cargas explosivas de forma estratégica para destruir diferentes edificios. Algunas de las misiones que se nos encomiendan son en zonas con alarma, de tal modo que en cuanto comencemos a hacer ruido, saltará dicha alarma. Deberemos encontrar el puesto de sonido y destruirlo si no queremos que se den cita quinientos enemigos alertados por la sirena.

Más adelante aparecerán misiones en las que deberemos rescatar a inocentes civiles, otras en las que destruiremos a golpe de explosivos arrojadizos casas marcadas con dianas, e incluso algunas en las que nuestros objetivos a derribar serán mastodónticos robots a los que deberemos adherir dinamita. Todo esto por supuesto rodeados de enemigos a los que deberemos eliminar si no queremos morir en el intento.

Una de los grandes descubrimientos que haremos a lo largo de nuestras partidas será el autopropulsor, un aparato que Rome se colocará a la espalda y le permitirá acceder a lugares que de otra forma serían inaccesibles para él. Ciertamente es una gran experiencia para el jugador poder experimentar los increíbles saltos que efectuaremos con el autopropulsor, y la capacidad de planeado que tendremos durante la bajada.

Un modo de juego adicional aparecerá cada cierto tiempo, poniéndonos a los mandos de una torreta ametralladora que se situará sobre unos enormes muros, y que nos servirá para conseguir que las hordas de enemigos en oleadas de varias decenas, no lleguen a escalar los muros y traspasarlos. Los proyectiles de que dispone la torreta como arma secundaria son increíblemente útiles para esta labor.

También dispondremos de todo tipo de bombas, y granadas para abrirnos paso entre las lineas enemigas, e incluso, un potente lanzagranadas con forma de trombón (si, oyen bien, con forma de trombón) capaz de derruir el solo un edificio entero, sin olvidar el lanzamisiles, que nos ayudará con los enemigos lejanos y poderosos. Pero sin duda, la gran estrella de nuestro arsenal (sin desmerecer al resto) es el rifle lanza-tiburones, un arma surrealista que lanzará un proyectil bajo tierra que se convertirá en un grandioso tiburón blanco (que nadará en la grama, por supuesto) dispuesto a emerger en la posición exacta de algún incauto enemigo y devorarlo sin miramientos. Por supuesto, no duran eternamente, y con el tiempo desaparecen.

La puntuación en cada una de estas categorías afectará a la hora de sumar puntos, puntos que no engrosarán una cuenta de la que el jugador pueda beneficiarse sino que ampliará de manera llamativa la recompensa que el malvado rey ofrece por la cabeza (o mejor las cuatro cabezas) de la banda Lionheart.

Y a parte de la opción de ver demos de otros juegos se nos ofrece la posibilidad de descargar contenidos nuevos desde la red para el juego, cosa que alargará la vida del juego considerablemente aunque no nos hace olvidar en modo alguno la carencia de modalidad multijugador, ya sea a través de internet, interconexión o pantalla dividida. Una verdadera lástima.

Quizás podría haberse exprimido algo más la vertiente estratégica en las misiones en las que te acompañan el resto de miembros de la banda, con un interface de órdenes bien diseñado para los demás protagonistas el juego podría haber dado mucho más de sí.

l  o    m  e  j  o  r

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