Más vale tarde que nunca...

¡La corporación Nostra se parepara para someter al mundo a su particular anarquía! Es algo que no puedes permitir. Prepara tu Interceptor y lánzate en un juego que combina acción a raudales con la conducción más audaz.

Esto es precisamente lo que nos propone Midway, de mano de Paradigm y de Point of View, en Spy Hunter, una mezcolanza bien batida de géneros, que aprovecha el rescate de un juego tan carismático como lo fue el original en el que está basado, pero con una puesta al día más que necesaria.

Spy Hunter era un arcade de perspectiva cenital creado por Bally Midway en los primeros años de la década de los 80. De concepto sencillo pero muy adictivo (como casi todos los arcade de aquella época), el objetivo primordial era conducir un coche especial dotado de armas y "gadgets" como pantallas de humo o los charcos de aceite, y eliminar a los enemigos que iban interponiéndose en nuestro camino a través de sinuosas (¡y tanto!) carreteras. Siguiendo un poco la moda que actualmente inunda de alguna manera el mundo de los videojuegos, Midway ha decidido echar mano de su clásico y traerlo hasta los tiempos que corren, y el resultado, al menos en lo jugable no es nada decepcionante, otro cantar es el aspecto técnico... Pero no adelantemos acontecimientos y sigue leyendo, ¡la historia de Spy Hunter no tiene desperdicio!

Nostra, una corporación con sede en Israel y dedicada a la producción de toda clase de productos cuanto menos cuestionables, desde armas biológicas hasta misiles de crucero, parece necesitar algo de atención por parte del mundo y está empezando a dejarse notar en todos los ámbitos de los conflictos alrededor del planeta. Elecciones amañadas, políticos corruptos comprados por la propia Nostra, o intereses cruzados con los caciques de las dictaduras más belicosas, son sólo pequeños escalones en la subida de Nostra hasta lo más alto de mano de su líder , Daemon Curry un loco millonario de nombre gastronómico y con peligrosos aires de grandeza y aspirante a dios.

Evidentemente esta amenaza "cuasi terrorista" no puede permitirse, y enseguida la IES (Servicios de Espionaje Internacionales) se ha puesto en marcha para tratar de combatir la amenaza de Nostra. Para ello se ha creado, en el más absoluto secreto, el denominado equipo Spy Hunter, cuya principal arma es el coche Interceptor G-6155, que más que un simple automóvil es todo un prodigio de la ciencia, gracias a su increíble capacidad de transformarse en lancha y moto, a su potente arsenal ofensivo y defensivo, y la inclusión un ordenador de a bordo con la voz más sensual y sugestiva que Michael Knight pudo imaginar en sus años mozos. Como piloto del impresionante Interceptor tendrás que acabar con los secuaces de Nostra repartidos a lo largo y ancho de 12 extensos niveles, aprovechando la capacidad del G-6155 y tu formación como piloto de F-15 (¡guau!). En todo caso no los subestimes. Ellos son muchos y también están equipados con vehículos motorizados dotados de la última tecnología en armas disponible en el mercado (no en vano son los malos malísimos con el ricachón dominante por detrás), así que enfúndate el traje especial y ponte en marcha. Salvar el mundo está, de nuevo, en tus manos.

g  r  á  f  i  c  o  s  :

Desafortunadamente la conversión a GameCube sufre de gravísimos problemas, obviando incluso la imposibilidad de seleccionar un modo de 60hz. Esto de algún modo podría haberse subsanado con una buena puesta en escena para el mercado PAL, pero no ha sido así y el resultado no puede calificarse más que de lamentable, y por mucho que nos pese. En primer lugar la pantalla se verá adornada por dos bellas franjas negras en la parte superior e inferior, tal y como mandan los cánones de los 50hz vamos... En segundo lugar el framerate es bastante inestable, y en la mayoría de las ocasiones aborrecible, por debajo de los 30fps y con continuas ralentizaciones que pueden llegar a agravarse cuando hay numerosos enemigos en pantalla, con la consiguiente pérdida en el control. Pero en tercer lugar, y lo que nos parece ya del todo bochornoso, es la NO filtración de algunas texturas. Increíble pero cierto, en algunos momentos, y si paráis el coche, podréis asistir atónitos a una visión más propia de PSOne y no de una consola de última generación. Triste, muy triste, y más teniendo en cuenta que la filtración no debe suponer ningún problema ya que está implementada en el hard de GameCube. En fin, esperamos que se deba a las prisas por sacar la conversión adelante y que no vuelva a repetirse en trabajos posteriores de Point of View.

En cuanto a los aspectos positivos de este apartado, que también los hay, no podemos dejar de mencionar lo extensos que resultan la mayoría de los escenarios, en los que atravesaremos diferentes "ambientes", y la transformación de nuestro bólido en lancha y moto, bastante creíble y divertida (nos recuerda muy mucho a las series antiguas tipo Mask o incluso Transformes) y con un efecto en ocasiones "a-la-Matrix" que queda francamente bien plasmado en vuestros monitores.

Los menús por su parte también son atractivos, fieles al estilo "espías" que quiere reflejar Spy Hunter, y sencillos de navegar, pero sin alardes gráficos ni efectos que traten de redimir el desastroso resultado obtenido durante la partida en plena persecución. Otra vez será.

m  ú  s  i  c  a  :

Remezclas del tema original del clásico para el Spyhunter original "Theme from Peter Guun" compuesto por Henry Manzini y que tanto os sonará. Para la ocasión se cuenta con un grupo prácticamente desconocido por estos lares y de nombre algo estrafalario: Saliva. Llamadme ignorante en cuestiones musicales, pero es la primera vez que escuchaba hablar de esta banda de Memphis, y que supuestamente había entrado entre los 10 primeros de la lista de rock de la MTV americana. En fin. Para disfrute de los amantes del "rock moderno" y desafinado, en Spy Hunter podrán recrearse del video musical que esta banda protagoniza con la remezcla del tema de Peter Guun escondido en forma de extra, y del que podéis ver un extracto en el link de más arriba. El vídeo en sí es algo cutre, pero no está nada mal como extra (hubiéramos preferido la inclusión del Spy Hunter original como en el a versión Xbox pero así es la vida).

En cuanto al resto de temas musicales que componen la banda sonora del juego, no podemos quejarnos. Cada nivel posee su propia melodía, bastante ambiental, muy de acorde con los tintes peliculeros de serie B que constantemente toma la acción, y que se quedarán en segundo plano con respecto a los efectos sonoros y la voz de Leonie, pero que sin ella, jugar no es lo mismo (probadlo y nos contáis). Midway además nos ofrece la posibilidad de disfrutar de un modo de sonido Surround, regularmente implementado, pero superior al convencional "stereo" y mil veces mejor que "mono".

s  o  n  i  d  o   F  X  :

No cabría esperar menos de un juego de este tipo. Explosiones, disparos, misilazos..... todos están fielmente representados en Spy Hunter, unos mejores que otros, como los mísiles guiados, pero entre toda esta parafernalia destaca la voz de nuestro ordenador de abordo, llamado Leonie, (y, ¿casualmente?, con el mismo nombre que la encargada de ponerle voz en la realidad, Leonir Choi) A modo de "Kit" en el coche fantástico, Leonie nos pondrá sobre aviso de nuestros objetivos a medida que nos encontramos o nos acercamos con ellos durante las misiones, y de paso nos ofrecerá algún comentario que otro sobre nuestra última actuación. Es una pena que no se le haya dado mayor protagonismo (y si hubiera sido con un tono sarcástico mejor que mejor), pero por lo menos ayuda a sentirnos al volante de una máquina realmente moderna.... ¡si hasta habla!

El resto se reducen a algunos derrapes, chirridos de ruedas, y pocos, muy pocos sonidos ambientes. Sin deslumbrar pero cumpliendo perfectamente con su función.

j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d  :

Algo de lo que puede presumir Spy Hunter perfectamente es de ser un juego divertido, al menos en las primeras partidas y hasta que termines con todas las misiones que podrán encargarte. El paso del clásico 2D de principios de los 80 se ha hecho atendiendo a los tiempos modernos que corren, pero por suerte no ha perdido la esencia de las persecuciones bidimensionales de entonces y además se han ampliado bastante las posibilidades.

Básicamente Spy Hunter te ofrecerá un puñado de misiones a cumplir en tu particular guerra contra la organización Nostra. Estas misiones tendrán a su vez una serie de objetivos, primarios y secundarios. Los objetivos primarios o principales son ineludibles para continuar jugando, y van desde derribar a un helicóptero hasta localizar un determinado vehículo en el enorme mapeado y acabar sin miramientos con su existencia. Los objetivos secundarios por su parte no serán más que añadidos interesantes a la misión, pero que no por ello debes menospreciar. Activar Satcoms, tratar de causar el menor número de bajas civiles o destruir un nuevo prototipo en pruebas de Nostra, pueden ser algunos de estos objetivos. Si te decimos que no deberías dejarlos de lado, es porque los objetivos en Spy Hunter valen su precio en oro. Si consigues cumplirnos te otorgarán puntos, y estos puntos te abrirán misiones posteriores (eso sí, siempre que cumplas con los objetivos primarios correspondientes), pero además te servirán para destapar secretos y algunos extras, destapar los niveles multijugador, y en definitiva aparecer en lo más alto de la tabla de "Hi-Score", que de eso se trata...

El control del Interceptor por su parte no recibirá ninguna queja de un servidor. Se deja manejar bastante bien y responde con precisión a nuestros nerviosos movimientos con los dedos. Quizás el acceso al cambio entre armas ofensivas/defensivas sea algo complejo (mediante el botón Z) y entre el lío que puede formarse en pantalla en algunas ocasiones nos haga mala jugadas. Pero esto en realidad es un fallo de Nintendo al diseñar el mando de GameCube, en el que este "extraño" botón no tiene cabida más que como apoyo (como en Super Mario Sunshine por ejemplo).

La conducción además cambiará ostensiblemente cuando transformemos nuestro coche en una lancha y surquemos los canales o directamente el mar, o en una moto, en la que los giros son más bruscos y es más propensa a desviarse cuando somos alcanzados (en todo caso su escaso escudo hace poco aconsejable recibir disparos de enemigos).

El modo para dos jugadores (sólo dos, no más), permite competir entre dos amiguetes a tres minijuegos diferentes que nada, o casi nada, tienen que ver con el juego original. Olvídate de un modo cooperativo (hubiera sido genial sin duda), o un modo historia, en Spy Hunter, y menos es nada, eso es cierto, podrás participar en una serie de juegos uno contra otro y aprovechando las armas que hayas obtenido del Interceptor:

c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n  :

En conjunto Spy Hunter es un título que va a menos por sus torpezas técnicas que se ven agravadas además en la patética conversión PAL. Es una lástima, ya que el núcleo del título, su jugabilidad, y las misiones, son divertidas, pero todo se echa a perder cuando tenemos que pelearnos de mala manera con un frame rate horripilante y un entorno pixelizado que nos recuerda tiempos anteriores. Además, y para mayor desgracia, la versión para GameCube ha sido despojada de varios extras que podíamos encontrar en la versión original de PS2, o en la posterior Xbox como el Spy Hunter original de 1983.

Si quieres un juego que combine acción y velocidad a partes iguales, divertido, y deudor de una época excelente para los videojuegos, puede que Spy Hunter sea tu elección, pero déjanos aconsejarte que antes de tomar la decisión de ir a por él trates de alquilarlo. Nos lo agradecerás.

l  o    m  e  j  o  r  :

l  o   p  e  o  r  :