Jesús Velasco: “De la Fuente es un espejo en el que mirarse”
El nuevo seleccionador atiende a AS antes de que España inicie su camino en la fase de clasificación a la Eurocopa. “Es un privilegio estar aquí“, asegura.
Sonríe, saluda y estrecha la mano con fuerza. Su semblante transmite la misma firmeza, la del trabajo constante, metódico y coral. Desde que Jesús Velasco (57 años) asumiera el cargo de nuevo seleccionador es inevitable volver a ilusionarse con una Selección de fútbol sala que tocó fondo en el pasado Mundial, eliminada en octavos de final a manos de la modesta Venezuela. El toledano no necesita presentación, merced a uno de los currículums más exitosos que existen en los banquillos (tres Champions, siete Ligas, cinco Copas de España, dos Copas del Rey y cinco Supercopas más 15 títulos en Italia), con el que La Roja inicia una nueva etapa. La primera parada será la fase de clasificación a la Eurocopa 2026 que arranca este jueves frente a Suiza (Bosnia e Inglaterra, los otros rivales), primer compromiso oficial para un Velasco que se estrenó con victoria en un amistoso ante Portugal el pasado noviembre. Antes de viajar hoy a tierras helvéticas, el técnico atendió a AS en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
-¿Cómo lleva los primeros meses en su nuevo cargo?
-A nivel personal y de trabajo es todo nuevo. Estoy intentando adaptarme a esta nueva situación en mi vida profesional y disfrutando del hecho de estar en la Federación, porque yo creo que es un privilegio estar aquí y, sobre todo, intentando ver cómo afrontar este nuevo tipo de trabajo, que no he hecho nunca.
-¿Qué hay de diferente en dirigir a un club respecto a ser seleccionador?
-Sobre todo, ese análisis de jugadores es lo que principalmente hacemos el cuerpo técnico y yo. Un tiempo antes de cada concentración preparamos el número de sesiones que vamos a hacer, planificamos bien el modelo de juego, lo que creemos que nos vamos a encontrar y después decidir bien con la convocatoria de los jugadores.
-Desde su llegada se ha respirado un clima de renovada ilusión por la Selección. ¿Usted también lo ha sentido?
-No puedo comparar esto con lo que he hecho antes. No porque lo de antes fuera peor o mejor, sino porque es diferente. Es un prisma diferente. Cada entrenador tiene un modo de ver el fútbol sala y el mío, por supuesto, es diferente. No sé si es mejor, no sé si es peor, es el mío. Y en ese sentido sí que me dicen que han notado el cambio. Esperemos que en cuanto a resultados sea satisfactorio.
-Usted que vio esa eliminación de España en el pasado Mundial desde la grada, ¿cree que la Selección tocó fondo en ese partido?
-Creo que fue una situación muy complicada para todo el mundo del fútbol sala en España. Ojalá tocásemos fondo ahí, y esperemos no hacerlo peor. Tanto en mi etapa como en las que vengan después. Por desgracia ha sucedido y ya está, tampoco hay que rasgarse las vestiduras. Esto no deja de ser deporte, pero está claro que nosotros estamos habituados a llegar más lejos en los Mundiales, en las Eurocopas. Tenemos que intentar que no suceda en la medida de lo posible.
-La Selección no consigue un título desde la Eurocopa 2016. ¿Qué ha faltado en este período de sequía?
-No te sabría decir. Es una pregunta un poco complicada. Voy a hablar desde la ignorancia porque yo no estaba en el día a día de lo que se hacía antes. Yo ahora veo gente con mucha ilusión, con muchas ganas, que yo supongo que eso lo habría antes. Solo hemos tenido un partido de competición, el de Portugal, que no deja de ser un amistoso, pero que era muy complicado. He visto muy buena actitud, muchísima competitividad y jugadores que quieren aportar todo lo que tienen, que yo creo que es lo que hay que aprovechar a la hora de estar en la Selección. Es un honor, es un orgullo estar aquí y también es una responsabilidad intentar hacerlo bien. Todo eso lo he visto y espero que sigamos por ese camino.
-En cuanto a método de trabajo y estilo de juego, ¿cuál será su filosofía?
-Siempre he tenido un trato cercano con mis jugadores, me gusta mucho escuchar su opinión, porque al final yo no juego, yo soy solo quien elige quien viene y el número de minutos que juega cada uno. Intento darles pautas, pero me apoyo mucho en ellos, les escucho mucho, sus ideas, lo que proponen, intento darles confianza para que ellos aporten lo mejor que tienen a la hora de jugar los pocos partidos que hay con la Selección. Ahora mismo tenemos seis partidos en los que hay que hacerlo lo mejor posible para intentar ganar esa clasificación. Entonces no tenemos mucho margen de error, tenemos que ser conscientes de ello y actuar en consecuencia.
-El fantástico momento que atraviesa la Selección de fútbol, donde destaca la fuerza colectiva por encima de las individualidades, ¿es un modelo a seguir?
-Creo que Luis de la Fuente nos está dando una lección a todos de cómo gestionar un grupo, de cómo cumplir los objetivos. Es cierto que hay cosas que se pueden transferir y hay otras que no, pero desde luego es un espejo en el que mirarse. Mi idea va un poco por ahí, el no contar con un número pequeño de jugadores sino contar con el mayor número posible, dar la oportunidad al mayor número de jugadores para después intentar dar soluciones en momentos en los que haya lesiones o nombres importantes que no estén en un estado de forma óptimo. Para eso es la idea de ver muchos jugadores. Yo no sé si exactamente es lo que hacen ellos, pero a mí me gusta esa forma de gestionar. Y en ese sentido, no sé si es copiar, pero sí que intento parecerme lo más posible a ella.
-¿Su idea es probar piezas diferentes en esta fase de clasificación o encontrar un bloque de confianza lo antes posible?
-Lo importante es tener un grupo competitivo. Si es de 80 jugadores, mejor que de 20, y si es de 40, mejor que de 25. Si solo hay 20 competitivos, habrá que contar con esos 20. Pero yo creo que estamos en la liga más competitiva del mundo y tenemos que aprovechar eso. Hay muchos jugadores que son competitivos y que pueden tener la oportunidad de demostrar que pueden jugar en la Selección. En la primera convocatoria, yo creo que los 14 que vinieron demostraron que pueden estar jugando cualquier partido oficial de cualquier torneo. Y ahora esperamos que al terminar esta nueva ventana, los 14 que han venido nos sigan demostrando lo mismo. Ya en lugar de 14, tendremos 18 y vamos a ver cuántos vienen que no hayan estado y a ver si podemos seguir ampliando. El objetivo prioritario es que el equipo sea competitivo, que consigamos, si es posible, ganar. Y si no ganamos, que nos vayamos todos con buenas sensaciones. Yo siempre he dicho que el resultado es una consecuencia del juego que haces. Y aquí lo importante es hacer buenos partidos y eso nos va a dar buenos resultados.
-Suiza, Bosnia e Inglaterra. ¿Cómo valora estos rivales de la fase de clasificación?
-Ya hemos visto en el Mundial lo que ha pasado con el pedigrí... España y Portugal se fueron en octavos. Yo entiendo que medios de comunicación, aficionados, el entorno puedan hacer una determinada valoración. La mía: tengo tres partidos, me da igual contra quién juego. Nosotros tenemos que ser fieles a nuestra forma de jugar, al patrón que estamos trabajando ahora mismo. Y ese es el objetivo, conseguir ser disciplinados en ese sentido, llegar a los partidos y conseguir plasmar lo que estamos entrenando ahí. Lo más normal es que los ganemos.
-Por culpa de las lesiones, Sergio Lozano no pudo estar en la cancha en el pasado Mundial. Merece una mejor despedida de la Selección.
-Ahora mismo es un jugador más de todos los que hay. Y yo cuento con él como cuento con todos los demás. Ahora no está jugando, por lo tanto, no tiene ninguna posibilidad de venir. En el momento que empiece a jugar y, sobre todo, que consiga una continuidad en el juego, ya valoraremos, por supuesto. Es un jugador que, si está físicamente bien, va a dar muchísimo a su club, a la Selección, en cualquier sitio que esté, pero tiene que estar bien. Y ahora mismo no lo está. Hay muchos más casos, no solo Sergio Lozano. Catela todavía no ha venido, Mellado tampoco... Podría hablar de otros cuantos jugadores. Hay jugadores de muchísima calidad, pero no es cuestión de calidad ni de competitividad, es cuestión de aunar todo. Tienen que estar físicamente bien y tienen que estar en un grado de confianza óptima para poder competir en la Selección, porque damos oportunidad a jugadores que vemos que lo están mereciendo. En el momento que él lo merezca, vendrá.
-Igual que no hace tanto fue el deporte de moda en España, el fútbol sala he perdido interés en los últimos años. ¿A qué cree que se debe?
-Este es un tema del que se habla mucho. Tengo una opinión bastante bien formada, porque tengo que ver todos los partidos, analizarlos... Ahora mismo no se juega como hace 20 años. El problema es que los árbitros no aplican el reglamento, ese es el problema. A nivel europeo, a nivel mundial, hay un reglamento escrito que los árbitros no aplican. Se permite agarrar, se permite empujar, se permite golpear al rival y jugar un balón con una persona que está constantemente golpeándote, empujándote, agarrándote y que el árbitro no pita absolutamente nada. Es poco menos que imposible. Y eso es lo que está sucediendo. ¿Qué es lo que pasa? Si tú ves un partido ahora, lo que ves son diez personas pegándose, el árbitro diciendo ‘siga, siga’, con un riesgo de lesión enorme y sin ofrecer nada. Pues son solo balonazos, goles de balón parado y goles de 5 para 4, no hay nada más. No hay juego, no hay desequilibrio en el juego, no hay uno contra uno, no hay paredes, porque es imposible. Sigue habiendo jugadores con talento, con mucha calidad, pero el problema es que los árbitros han dejado de pitar. Y nadie sabe lo que pitan. En España creo que sí que ha habido un cambio. Y desde luego, desde mi punto de vista, tenemos que seguir en ese cambio. Hemos tenido bastantes reuniones desde los entrenadores con los árbitros. Yo creo que lo han entendido y que esto está cambiando. Siempre pongo el ejemplo del baloncesto. Si tú vas a lanzar la canasta y yo te meto un empujón o te meto un manotazo en la mano, no metes una canasta en todo el partido. Y eso es lo que está pasando en el futbol sala. Es muy triste que hayamos llegado a esta situación, pero yo por lo menos en España voy a hacer todo lo posible para que esto cambie y haya juego de verdad. Y entonces la gente volverá a interesarse seguramente.
-Ahora que estamos en Navidad, ¿qué deseo le pide al 2025?
-A nivel personal, que todo siga como está yendo. Se me ha dado muy bien como entrenador de clubes y ahora el deseo es que se me dé igual de bien como entrenador de la Selección española. Y a nivel colectivo, que estemos cada uno centrados en las cosas importantes de la vida y dejemos de lado las que no son importantes.