La reina Simone Biles gana su 16º oro en los Mundiales
La estadounidense fue la mejor en salto, suelo y barra, y sólo tercera en las asimétricas, el peor de sus cuatro aparatos. Se queda, con 22, a una medalla de Scherbo.
También es cierto que se quedó lejos de los 60,00 puntos, esa cifra mágica del nuevo código de la gimnasia, pero sólo a un punto (58,999), con más de dos de ventaja sobre la segunda, la china Xijing Tag (56,899), y más de dos y medio sobre la medalla de bronce, la rusa Angelina Melnikova (56,399) famosa entre los aficionados por su calidad, y porque en la final por equipos en plena actuación se le deshizo el moño en suelo, y supo acabar con buena nota pese a que las guedejas le tapaban la cara.
Simone ya tiene 22 medallas en los mundiales, 16 de oro. Un hito, con cinco individuales, récord entre las mujeres pero sin superar al japones Uchimura. Pero de Stuttgart posiblemente salga como la gimnasta, hombre o mujer, que más veces ha subido al podio: está a una medalla de Vitali Scherbo (23), y ella tiene cuatro opciones más en las finales, dos y dos, del sábado y el domingo-
Cuando se presentó en Amberes 2013 como un talento de futuro nadie podía pensar en su evolución imparable, para firmar los títulos mundiales en Manning, en Glasgow, en Doha y ahora en Amberes, con el oro olímpico de 2016 entre medias. Esta vez, además, sus rivales más aguerridos se fueron cayendo según avanzaba la competición, incluida su compatriota Lee Sunisa (dos veces en las asimétricas), como la francesa Dos Santos, o la rusa Lilia Ahhaimova, hundida en la penúltima plaza desde la segunda rotación.
Cintia Rodríguez mejoró su puesto pero no su puntuación: la 21, con caída en la barra incluida, con un 51,466 en a general. En realidad estuvo por debajo de sus posibilidades, las que le llevaron a estar entre las 24 mejores del mundo.