Nacida en Puerto Rico, pero criada en Brooklyn, Amanda Serrano (36-1-1, 27 KO) ya puede decir que es una de las mejores de la historia del boxeo. Es campeona mundial en siete divisiones, un logro que consiguió en enero al alzarse con el cinturón WBO del peso supermosca. Había dudas sobre si lograría ganar a la báscula. Lo hizo y tras un descanso regresa a la acción este viernes. 'The Real Deal' buscará el Mundial WBO (también el WBC interino), pero en esta ocasión en el peso pluma (tres categorías por encima de su última pelea) y lo hará en uno de los templos del boxeo: el Madison Square Garden. Será en su teatro (más pequeño), pero la esencia es la misma. Por segunda vez boxea allí, y es que Serrano era una habitual de Brooklyn, pero en los últimos dos años su fama ha crecido y Manhattan la ha llamado.

Segundo duelo allí y también bajo el paraguas de DAZN, que retransmitirá la pelea. La cita es complicada, ya que se enfrenta a la actual campeona, que llega invicta a su primera defensa. Heather Hardy (22-0, 4 KO), irlandesa, pero criada también en Brooklyn, se enfrenta a su pelea más difícil. Eso hace que la puertorriqueña sea muy favorita en las apuestas, pero no será un pleito sencillo. Tanto baile en los pesos no ha pasado factura de momento a Serrano, pero debe tener cuidado. En esta ocasión ha tenido tiempo y se prevé que llegué en forma. Su boxeo dinámico y contundente marcará todo.

El combate ha movido mucho. Pese esas cuotas de apuestas, muchos creen que Hardy podrá con Serrano, y ella puntualiza: "Es quizá mi rival de más renombre, pero no la mejor a la que me haya enfrentado", ha asegurado en la previa. Otro de los factores que ha ayudado a la promoción ha sido el morbo. Ambas también se han metido en la jaula (Serrano tiene contrato con Combate Américas) de MMA. ¿Una revancha en ella? Depende de este combate podría ser atractivo, pero la costarricense también ha querido zanajarlo. "Tras nuestra pelea del viernes no creo que quiera volver a enfrentarse a mi", aseveró. Está confiada Serrano, quiere ser reina de nuevo en el pluma (lo fue en 2016) y hacerlo en el mejor escenario posible. El Madison Square Garden.