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NFL

Roberto Aguayo queda fuera del barco de los Bucaneros

El pateador de origen mexicano inició la pretemporada con los mismos fallos que marcaron su campaña anterior

Actualizado a
El pateador de origen mexicano inició la pretemporada con los mismos fallos que marcaron su campaña anterior
Getty Images

Es oficial, los Tampa Bay Buccanneers perdieron al apostar una selección de segunda ronda a favor de Roberto Aguayo.

El pateador de ascendencia mexicana, quien llegó el año pasado a la NFL con la etiqueta de ser el más certero en la historia del fútbol americano colegial, jamás cumplió con las expectativas que van acompañadas de una selección tan alta y finalmente se le acabó el tiempo.

Los Bucs anunciaron el sábado la baja de Aguayo, después de que el viernes fallara un intento de punto extra y un intento de gol de campo en la derrota de Tampa Bay ante los Cincinnati Bengals.

La noticia no debería resultar una sorpresa para nadie.

El año pasado, Aguayo tuvo la peor efectividad entre los pateadores regulares de la NFL al concretar apenas el 71% de sus intentos de gol de campo (22 de 31) y falló dos de sus 34 intentos de punto extra.

Como si la etiqueta de segunda ronda y la presión acumulada después de un año por debajo del radar no fueran suficientes, el equipo sumó este año al veterano Nick Folk con la esperanza de que Aguayo despertara y retomara la gran forma de sus días con los Seminoles de Florida State, donde concretó el 96.7% de sus intentos totales, puntos extra y goles de campo.

Pero un pateador de la talla o el nivel mostrado por Aguayo hasta ahora no es un arma sino un obstáculo para una ofensiva que está llamada a cosas importantes este año con la adición del explosivo (en todo sentido) DeSean Jackson y el novato sensación, el tight end O.J. Howard, quienes de la mano de Jameis Winston aspiran a llevar a los Bucs de regreso a la postemporada luego de nueve años de ausencia.

En un grupo que aspira a la excelencia, la inconsistencia de Aguayo no tenía lugar.

De hecho, el único que parece estar sorprendido con la noticia es el mismo Aguayo.

Apenas unos días dijo que “estaba divirtiéndose” con la competencia con Folk. Lo mismo dice el niño que juega con el pitbull, hasta que le muerde.

Incluso la noche del viernes, después de fallar su intento de 47 yardas y su intento de punto extra, además de convertir un gol de campo de 20 yardas, Aguayo parecía no estar al tanto del inminente peligro, cuando declaró: “No es lo que quería. Obviamente no son los estándares que quería. Solo queda mantener la cabeza en alto y pasar al siguiente día”.

Para Aguayo no hay un siguiente día, no en Tampa Bay al menos.