El Ademar impuso su regularidad y su calidad en ataque

ASOBAL | NATURHOUSE 27 - REALE ADEMAR 37

El Ademar impuso su regularidad y su calidad en ataque

El Reale Ademar logró un claro triunfo en Logroño, ante el Naturhouse La Rioja, por 27-37, gracias a su capacidad para mantener un ritmo más regular durante todo el partido y para no cometer errores en ataque, al revés que su rival.

El equipo leonés impuso la lógica y se llevó la victoria de Logroño con menos dificultades de las esperadas por sus últimos malos resultados fuera de casa y por la trascendencia del partido para las aspiraciones europeas de los locales.

Pero ni el Ademar flaqueó, ni el Naturhouse le dio al partido la misma intensidad que en otras ocasiones, lo que determinó su desenlace final.

El Ademar pudo romper el partido prácticamente en el inicio, gracias a una fuerte defensa 6-0 que descentró al Naturhouse, incapaz de encontrar espacios.

Los riojanos estuvieron cinco minutos sin marcar y su peor momento llegó cuando a los nueve minutos perdían por 1-6 y el Ademar se sentía totalmente cómodo sobre la pista, con Sarmiento liderando sus ataques.

Entonces, cuando se vio contra las cuerdas, el equipo local reaccionó, le dio velocidad al partido y empezó a creer en sí mismo.

Eso le llevó a cometer muchos errores y a precipitarse, pero poco a poco los riojanos se adueñaron del partido y fueron reduciendo las diferencias ante un Ademar que ya no estaba tan cómodo.

El conjunto riojano volvió al partido en la recta final del primer tiempo, cuando colocó el 9-10 en el marcador, aunque tres errores consecutivos en ataque -entre ellos dos penaltis- devolvieron un marcador más favorable para los leoneses, que se retiraron al descanso con tres goles de ventaja (13-16).

No obstante, el peor momento para el equipo de Jordi Ribera llegó a los cuatro minutos del segundo tiempo, con 17-18 en el marcador, y el partido a un ritmo que no le interesaba a los leoneses.

Pero, sin embargo, el choque prácticamente acabó ahí. El Naturhouse encadenó varios errores en ataque que le desesperaron y, que se unieron a varias decisiones muy discutidas de los colegiados, en su contra.

Así, el conjunto leonés recuperó una renta cómoda, de cuatro o cinco goles, con menos tiempo por delante y un Naturhouse cada vez más precipitado.

Y lo aprovechó. El Ademar, cada vez más seguro en sus acciones, que no se descentró, mantuvo su regularidad en el juego de ataque y ya no pasó apuros en ningún momento. Además, en los últimos momentos, agrandó su triunfo ante un Naturhouse que ya se había ido del encuentro.