El equipo mallorquín comenzó muy fuerte con un parcial de 6-2. El buen juego se ha mantenido durante el primer set con un Ibán Pérez inspirado y un excelente bloqueo mallorquín. Sin embargo, el Palma Volley se estancó en el punto 18, y el partido pasó de un 18-10 a un 18-14, lo que obligó a Marcelo Méndez a pedir tiempo muerto. Una polémica decisión del árbitro puso las cosas más igualadas y se pasó del 21-16 al 20-17. Pero los mallorquines no se descompusieron y supieron mantener la ventaja.
La superioridad del conjunto balear se mantuvo en los dos sets siguientes. El Palma Volley supo jugar mejor los puntos clave, fue mejor en la red, tanto en ataque como en defensa, para conquistar una victoria que se puede calificar de sorpresa, dada la entidad del rival.