El rodillo de Alemania supone un obstáculo de la máxima exigencia en la histórica semifinal del Campeonato de Europa de balonmano femenino que disputará mañana por primera vez España (14.00 h.) en Skopje.
Las germanas, que lograron el bronce en el último Mundial de Francia'07, han ganado todos sus encuentros en el torneo que se disputa en Macedonia, menos un empate con Bielorrusia. Su poderío es una clara demostración de que Alemania es hoy por hoy la meca del balonmano, primordialmente masculino, pero que en la versión femenina dispone también de un altísimo nivel que pondrá a prueba el sueño de una España para el recuerdo.
Jorge Dueñas y sus jugadoras tienen la ilusión por bandera. Saben que por potencial son inferiores y que les tiene que salir un partido más que perfecto para agrandar su histórica actuación y meterse contra todo pronóstico en la final.
Las españolas, que con esta presencia en semifinales se resarcen de no haber podido tener opción de estar en Pekín'08, apenas han tenido tiempo para saborear su clasificación, fraguada en una última jornada en la que tuvieron que esperar varias horas para, después de ganar a Hungría, esperar a que Noruega hiciera lo propio ante Rumanía.
El desgaste físico y las molestias que arrastran algunas de las pupilas de Dueñas son factores igualmente adversos que serán, no obstante, suplidos por la tremenda moral de un equipo que tan solo ha perdido en este torneo ante Dinamarca y que dio muestra de su ambición con el empate en el partido inaugural ante Noruega, defensora del título y campeona olímpica, y frente a Rumanía, principalmente.
Por tanto, para España es necesario defender al máximo en todas las zonas y con especial atención a la poderosa línea exterior germana, tratar de salir al contragolpe y en ataque no cometer errores y tener paciencia para tratar de desarbolar la fornida zaga alemana.
Grit Jurack, cuarta de la clasificación de artilleras del Europeo con 37 tantos, está siendo la gran referencia de Alemania en ataque, aunque también sobresalen en un bloque muy potente la lateral Nadie Krauss, del Copenhague, que acumula más de 160 internacionalidades, y la veterana guardameta Sabine Englert.
Tal y como reconoció Dueñas, España, cuya máxima goleadora es la canaria Marta Mangué con 33, tiene a favor que no parte con el cartel de favorita, que se otorga unánimemente a Alemania. "No tenemos ninguna presión, aunque realmente queramos llegar a la final", dijo el seleccionador español.
Alemania tiene también muchas ganas en este torneo después de no haber podido subir al podio en anteriores Europeos. "No debemos pensar en las derrotas de los últimos años, tan solo tenemos que mirar adelante y centrarnos en España, porque será un partido muy duro", dijo Jurack.
Nadie Krauss, por su parte, aseguró que el ambiente en su equipo "es muy bueno" y que espera que "esta vez el sueño de ganar el oro se haga realidad", así como aseveró que aunque parten con el cartel de favoritas "esto no cuenta, porque España es un equipo muy duro y todos los partidos contra ellas son muy igualados".
En el apartado histórico, España y Alemania se han enfrentado nueve veces, con un balance claramente favorable a las germanas, que han ganado ocho encuentros por tan solo un empate.
