El COI impide que España lleve el luto en Pekín

Pekín 2008 | Tragedia en el aeropuerto de Barajas

El COI impide que España lleve el luto en Pekín

El COI impide que España lleve el luto en Pekín

jesús rubio

Ni bandera a media asta ni brazaletes en memoria de las víctimas

El Comité Olímpico Internacional (COI) y la organización de Pekín 2008 desestimaron la petición de la delegación española para que la bandera nacional ondeé a media asta en la Villa Olímpica, en memoria de las 153 personas que perdieron la vida en el accidente de Barajas. Tampoco permiten que nuestros deportistas luzcan brazaletes negros en señal de duelo ni que se guarde un minuto de silencio antes de las competiciones con presencia española. La delegación española en Pekín, encabezada por los duques de Palma, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, y la ministra de Educación, Política Social y Deporte, Mercedes Cabrera, se concentró ayer en la Casa de España de la capital china para guardar un minuto de silencio como muestra de su apoyo a los familiares de las víctimas. A la concentración acudieron también el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, el presidente de honor del COI, Juan Antonio Samaranch, el presidente del COE, Alejandro Blanco, el embajador de España en China, Carlos Blasco, y la Consejera Delegada de Madrid 2016, Mercedes Coghen, así como presidentes de federaciones nacionales y muchos deportistas.

Este homenaje a las víctimas había sido autorizado por el COI (su única concesión) en la Villa Olímpica, pero el Comité Olímpico Español y el Consejo Superior de Deportes acordaron celebrarlo en la Casa de España (donde sí ondea la bandera a media asta) porque para entrar en la Villa se necesita una serie de permisos que era imposible se concedieran a todos las personas querían estar presentes en el acto de recuerdo a los fallecidos.

Blanco desveló las razones del no, esgrimidas por el director deportivo, del COI, Gilbert Felli: se produciría un "agravio comparativo" respecto a Zambia, Estados Unidos y Georgia, por la muerte de su presidente, el turista asesinado a poco de comenzar los Juegos en el centro de Pekín (familiar de un miembro del equipo de voley) y la participación de Rusia en los Juegos, aunque sí expresó sus condolencias por el trágico accidente. El presidente del COI, Jacques Rogge, envió una carta personal de pésame al rey don Juan Carlos.

Hubo homenaje

Las reacciones de nuestros deportistas no se hicieron esperar. De buena mañana, las marchadoras de la final de 20 kilómetros, María Vasco, Beatriz Pascual y María José Poves, y la saltadora de altura Ruth Beitia, llevaron en sus camisetas un lazo negro durante su participación. Fernando Echávarri y Antón Paz, oro en vela, clase Tornado, subieron al podio con brazaletes negros que se fabricaron con cinta aislante. La gimnasta Almudena Cid se quitó ayer el luto a instancias de la organización, pero declaró que hoy, en la última prueba de su carrera, se lo pondrá. Tampoco les permitieron llevar duelo a los jugadores de hockey en su partido ante Australia (3-2) que les lleva a la final con Alemania.

La decisión del CIO marcó el día después de la tragedia en Barajas que, desde el prisma deportivo, trajo dos nuevas medallas para España. El oro de Echávarri y Paz y la lucha del hockey por el oro, tras su triunfo en la semifinal.