Un total de 130 jugadores de toda España participarán en el III Gran Premio Ciudad de Valladolid, que se celebrará desde mañana hasta el domingo en el pabellón de Gimnasia del Polideportivo Huerta del Rey de la capital, según confirmó a Efe el presidente de la Federación de Billar de Castilla y León, José Soria.
Entre los favoritos a hacerse con el título, José Soria destacó "al mallorquín Carlos Crespo, ganador del torneo hace dos años, el madrileño Rubén Legazpi, que fuera campeón de Europa Júnior, el catalán Sergio Jiménez y los valencianos Juan Villora, vigente campeón del Premio, y Javier Palazón, campeón del mundo júnior".
En lo que respecta a la representación de Castilla y León, el presidente de la federación regional apostó por "Salvador Díez y Javier Herrero, ambos de Club Billar Valladolid, que han logrado clasificarse para la fase final del Campeonato de España que se disputará en Tomelloso el 21 de junio", dijo.
El III Gran Premio de España Ciudad de Valladolid, cuyo presupuesto asciende a los 36.000 euros, según informó Soria, ha contado con la colaboración de la Fundación Municipal de Deportes, Caja Duero, Junta de Castilla y León y Diputación Provincial.
Las eliminatorias previas comenzarán mañana, en las que están exentos los 16 primeros clasificados en el ránking nacional, que pasarán directamente a la fase final, y la entrada para presenciar este "espectáculo", será gratuita "hasta completar un aforo de 500 personas", especificó Soria.
Para animar a que el público acuda a ver este torneo, "se realizarán viernes, sábado y domingo, después de la última ronda, sorteos de una cadena musical, un televisor con DVD y dos televisores LCD de 26 pulgadas", anunció el presidente del organismo regional.
El ganador del Premio se embolsará 2.100 euros, mientras que el segundo obtendrá 1.500, el tercero y cuarto, 750 euros, 450 euros los que se clasifiquen desde el quinto hasta el octavo puesto, 250 euros los jugadores situados entre la novena y la décimo sexta posición, y 150 los clasificados entre dicho puesto y el trigésimo segundo.
En cada ronda competirán 12 jugadores, distribuidos en seis mesas, que deberán puntuar a 40 carambolas o 50 entradas, siendo imprescindible que la bola toque tres bandas o más antes de hacer la carambola.
"Es el segundo juego más difícil después del golf, ya que hay que poner en marcha un buen mecanismo -la situación en la mesa-, dar el efecto deseado a la bola y tener cabeza para pensar cómo lanzar, teniendo en cuenta que si sale mal, debes dejar al contrincante la peor disposición posible", analizó José Soria
