España logra el bronce en la persecución por equipos

Atenas 2004 | Ciclismo en pista

España logra el bronce en la persecución por equipos

La medalla de oro ha correspondido a Australia que derrotó a Gran Bretaña en una final con claro color 'aussie'.

España sumó su segunda medalla en el Velódromo Olímpico de Atenas gracias al bronce conseguido por el equipo de persecución, que hizo buenos los pronósticos y pudo en la lucha por el tercer puesto con Alemania.

El cuarteto nacional, formado por Carlos Castaño, Sergi Escobar, Asier Maeztu y Carlos Torrent, no falló en su pulso con los germanos y, con un tiempo de 4:05,523, superó a su rival por 1,670 segundos, cumpliendo con la superioridad que había demostrado en las dos series anteriores.

A pesar de ello, el equipo español tardó en plasmar su superioridad sobre la pista ya que la puesta en acción del cuarteto no fue nada buena y cedía casi un segundo en la primera vuelta que obligaba a un gran esfuerzo.

Los germanos aguantaron el mandó de la prueba hasta el kilómetro, en que se produjo la reacción de los españoles que comenzaban a recortar diferencias. La carrera era nueva en la undécima vuelta, cuando tan sólo una milésima separaba a los dos cuartetos, aunque España tomaba ya la delantera en el tercer kilómetro (3:05,004, medio segundo menos) y no lo dejaría hasta el final.

Los intentos del alemán Robert Bartko, bicampeón olímpico en Sydney en individual y por equipos, por no marcharse de vacío de estos Juegos fueron en balde. Las últimas tres vueltas las darían los españoles sin Castaño, que había hecho un desgaste decisivo a la hora de dar caza a los alemanes en la primera parte de la prueba.

La pista se convierte así en una de las grandes fuentes de metales de España en el medallero, siendo la segunda de las ocho logradas hasta estos Juegos, y la cuarta en la historia tras las de oro de José Manuel Moreno (kilómetro, Barcelona 1992) y Joan Llaneras (puntuación, Sydney 2000) y Sergi Escobar (persecución, Atenas 2004).

El líder del cuarteto, Sergi Escobar, se hace así con su segundo bronce en Atenas, tras el que había logrado en la persecución individual y se convierte en el tercer deportista español en la historia de los Juegos en sumar dos metales, tras el piragüista Herminio Menéndez (plata y bronce en Moscú'80) y la tenista Arantxa Sánchez Vicario (plata y bronce en Barcelona'92 y en Atlanta'96).

El título en la prueba fue para el cuarteto australiano, que recuperó el oro en la persecución para su país veinte años de su último éxito. En la final, Australia derrotó a Gran Bretaña por más de tres segundos, con un crono de 3:58.233 en los cuatro kilómetros.