Málaga, el gigante

Copa de la UEFA | Málaga - Boavista

Málaga, el gigante

Málaga, el gigante

mariano pozo

Peiró y sus jugadores quieren que La Rosaleda registre un lleno, pese a que el choque será televisado por Canal Sur.

Cuartos de final de la UEFA. Quizás en algún rincón de Vélez o Estepona, o junto al fuengiroleño Pepe (el que mejor asa los espetos de sardinas de esta parte de la tierra), alguien se encuentre tomando el generoso sol y leyendo el AS; quizás el paisano se refriegue los ojos de pura incredulidad al leer que este Málaga marinea por Europa sin vértigo, juega contra el Boavista y no se corta un pelo al pensar que puede seguir subiendo. Grande Málaga.

Joaquín Peiró, el veterano técnico malaguista, reclama el cariño de la gente, que este Málaga se merece mucho arropamiento, que La Rosaleda no presente ese aspecto desolador mostrando sus gradonas de cemento pasado y desnudas de malaguistas; que el personal acuda después del curro, vaya al estadio (tortilla en ristre si desea) y no se decante por lo más barato, la tele. Los de Peiró hacen un llamamiento a aquellos que prefieran hundirse en el sofá de su casa o jaleen al equipo desde la peña... del barrio.

Darío Silva, que se perdió el último choque de Grecia por sanción, será de la partida y formará con Dely la dupla mortífera que todos, incluyendo los portugueses, ya conocen. La Doble D, Sandro, Fernando Sanz, Josemi, Contreras y, por supuesto, Manu, el nuevo ciclón de Fuengirola, que va a más y tiene hambre de fútbol. Este Málaga invicto en Europa y con fama de sargento de hierro (es el menos goleado de Europa, honores que comparte con el Liverpool aunque los ingleses vienen de palmarla en la Champions y han jugado cuatro partidos menos) no se enfrenta a una tropa de cojos: el Boavista tiene buenas zarpas, aunque aterriza en La Rosaleda sin su hombre más desequilibrante, el brasileño Elpidio Silva. De todas formas, como nos dijo ayer Fernando Castro Santos, el gallego que es técnico del Braga, los de Oporto infieren duros castigos en cuanto el adversario se duerme en los laureles.

Todos estos días, tanto técnico como jugadores del Boavista han procurado traspasar la presión al Málaga, invistiéndolo de favorito. Y puede que lo sea: por calidad y maneras. Pero el cuadro de Joaquín Peiró, que reina en la UEFA desde el lejano julio, tiene que demostrarlo en la cancha, con buen fútbol y todas las ganas del mundo. Eso sí, al calor de una Rosaleda llena de malaguistas, metiendo presión al rival. Y no en familia.

Peiró: "Será muy difícil"

El técnico del Málaga, Joaquín Peiró, se mostró muy desconfiado pese a que las apuestas dan a su equipo como favorito: "Que nadie piense que tendremos un partido cómodo. Será muy difícil. El Boavista tiene mucha categoría pese a que no se le está dando esa importancia. Habrá que luchar muchísimo. Que la final se juegue en Sevilla es un aliciente, aunque nosotros queremos jugarla hasta en China".