El entrenador racinguista, Chuchi Cos, realizó unas declaraciones ayer en Radio Santander, de la cadena SER, en las que analizaba su primer mes y medio al frente del Racing. El cántabro reconoce que ni él mismo esperaba llegar a Santander de forma tan prematura: "Se precipitaron los acontecimientos. Yo estaba convencido de que terminaría la temporada en el Palamós, porque teníamos el objetivo claro de ascender a Segunda División. Como entrenador he nacido con Piterman, y como me ha ido muy bien, no puedo fallarle. No tengo marcha atrás, de un día para otro me encontré entrenando al Racing con todas sus consecuencias. Si le llego a fallar, a decirle que no quería venir, me quedo sin Racing y sin Palamós…".

El técnico asume que su camino y el del empresario van unidos: "Me he tirado al río por Dimitri, que me ha dado una oportunidad única. La gente ve poco a poco que el que entrena soy yo y no él. El hecho de sentarse en el banquillo no supone gran cosa, porque el día del partido poco puedes hacer para mejorar lo que no se haya hecho durante la semana. A la hora de realizar los cambios, él los consulta, no los impone. Decidimos juntos".

Chuchi reconoció que sus primeros días fueron muy duros: "Pasé afectado las dos primeras semanas. Piterman llegó con sus ideas y sus planteamientos, pero yo qué culpa tengo. Si a uno de los entrenadores que me critican le ofrecen entrenar al equipo de su tierra, ¿diría que no? Llegué y todo se me vino encima. Desde el primer día, hubo quien me dijo que lo dejara".

Le agradece el detalle a Floro

Tras la llegada de Piterman al Racing, varios entrenadores achacaron falta de profesionalidad a Cos, al considerar que le "prestaba" el carné de entrenador al ucranio para poder decidir en la materia deportiva. Cos lo pasó mal, y por ello quiso reconocer a Benito Floro su saludo del domingo: "Agradezco a Floro que haya sido el primer técnico desde que estoy en Primera que me haya saludado antes del partido. Lo valoro mucho".