Más de un bético se tuvo que frotar los ojos el martes cuando vio a Denilson soltar un zapatazo que retumbó en el semivacío Stadion Strahov de Praga. Había vuelto a marcar. Y lo había hecho por primera vez desde fuera del área. ¿Se desatará el brasileño? Por lo visto, él no tiene obsesiones y se lo toma con buen humor. Quizá sea lo mejor para quitarse presión. "No marco otro gol hasta dentro de seis meses", bromeó el bético, que luego habló de su tempestuosa relación con las porterías rivales: "No me obsesiona, pero estoy trabajando duro. Sé que me cuesta un montón marcar, aunque no me como la cabeza mucho porque intento hacer lo mejor para el equipo. Si tuviera con el gol la misma confianza que con el regate haría más goles seguro". Sin fiesta. Denilson fue otro de los protagonistas de aquella fiesta. Ayer, el zurdo reía, pero el año pasado... "Ahora reímos, pero vaya tela. Ahora resulta que es un asunto para bromear, pero aquello fue complicado. Menos mal que fuimos para arriba el año pasado. Si no, estaría muerto". En fin, aquello no es más que un mal recuerdo.

"El Málaga es un rival muy difícil"

El presente es el Málaga, un Betis con muchas ganas y más bajas todavía: "El Málaga va a ser un rival duro, porque seguramente está haciendo su mejor temporada desde que regresó a Primera. Jugamos en nuestro campo y tenemos esa ventaja. Seguro que será intenso y duro, pero queremos estar entre los cinco primeros clasificados cuanto antes. Necesitamos una victoria ya".