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REAL OVIEDO

Tito se centra en aligerar la masa salarial

El director deportivo, que reconoció que el tope está ligeramente sobrepasado, necesita dar salida a algún futbolista para apuntalar la plantilla

Actualizado a
06/07/22 

NOTICIAS REAL OVIEDO
ESTADIO CARLOS TARTIERE PRESENTACION COMO NUEVOS ENTRENADOR ASIER LUENGO Y QUENTIN BRAAT JUNTO AL DIRECTOR DEPORTIVO TITO BLANCO
PACO PAREDESDiarioAS

Ni en las mejores perspectivas imaginaba el oviedismo estar a estar alturas de verano, con margen suficiente para el comienzo de la competición, con la mayor parte de la plantilla cerrada. No fue así en los últimos veranos, en los que la confección del equipo se prolongó hasta las últimas horas. Incluso, el pasado curso, la llegada de Brugman se produjo sobre la bocina, anunciado oficialmente pasadas las 12 de la noche. Este año, la configuración avanza a ritmo trepidante.

Facilita de forma decisiva el asunto el hecho de que Tito heredó el grueso de una plantilla, formada hace una campaña por Rubén Reyes, con contrato en vigor. A pesar de las salidas de Reyes, rumbo al Getafe, y del Cuco Ziganda, ahora en Huesca, la idea que se vendió desde el club es la de “continuidad en el proyecto”. También se sumó a esa reflexión Tito Blanco desde el primer día de su trabajo en el Oviedo.

Tenía lógica: la temporada anterior, el club azul había acabado séptimo, tras una mala dinámica en el último mes de competición, y de cara al nuevo intento solo se trataba de repetir la fórmula y mejorar en puestos concretos.

Por eso, gran parte de la plantilla se mantiene ahora con Bolo. Está Tomeu Nadal en la portería (Femenías optó por firmar con el Levante a pesar de que Tito confiaba en su continuidad); en la zaga se mantienen Lucas, Dani Calvo. Rodri Tarín y David Costas (además de Jorge Mier tras su cesión a Unionistas); en la medular, siguen Jimmy, Luismi, Javi Mier y Hugo Rama; Arriba, calidad en las botas de los Borja Sánchez (su renovación fue la operación con más incertidumbre durante todo el verano azul y se saldó de forma satisfactoria con la llegada del nuevo dueño), Sangalli, Viti, Jirka, Obeng y Borja Bastón.

Para que el equipo dé un salto de calidad, se han firmado a siete futbolistas hasta la fecha: Quentin Braat (portero); Miguelón, Luengo, Pomares y Aceves (defensas); Marcelo Flores y Sergi Enrich (atacantes).

Ahora, Bolo trabaja con la tranquilidad de saber que el bloque mayoritario ya conoce sus métodos desde semanas antes de que la Segunda División eche a andar. Pero Tito no descansa en los despachos. Sigue pensando que es posible reforzar el equipo, darle un toque más de calidad.

El problema tiene que ver con los gastos. Esta semana, el director deportivo ha reconocido abiertamente que tenía sobrepasado el tope salarial, aunque afirmó que era una situación fácilmente reconducible. Pero instó el representante del Oviedo a lograr alguna salida de los futbolistas que en teoría tienen menos visos de contar con minutos con Bolo esta campaña.

La intención es lograr margen suficiente para, al menos, cerrar la llegada de un pivote. El equipo azul anda algo cojo en la zona tras la salida de Brugamn. Cedido por el Parma el curso pasado, el charrúa fue básico en los planes de Ziganda, y uno de los mejores pivotes de Segunda. Ahora, jugará en Los Ángeles Galaxy y el Oviedo ya busca otro encargado de trenzar las jugadas.

El apoyo de Pachuca

Al margen del trabajo de Tito en los despachos, el Grupo Pachuca, nuevo dueño del Oviedo, atiende en segundo plano dispuesto a echar un cable. La idea de los mexicanos es llevar a cabo una ampliación de capital que permita a los azules disponer de un mayor margen a la hora de fichar, ya que parte de lo invertido en ese proceso iría destinado automáticamente a inflar el tope salarial del Oviedo. Esta operación permitiría a los azules reforzar la plantilla en algún movimiento más interesante.