Luis Carrión ya está al mando y dirige el primer entrenamiento del Oviedo

El cambio de rumbo drástico tomó forma ayer en el Oviedo, tras un periodo de análisis de la situación, y el club anunció la salida de Álvaro Cervera y la llegada de Luis Carrión al equipo azul. Un volantazo en plena temporada, pues se pasa del estilo defensivo del cántabro a uno más alegre del nuevo jefe. Con el cambio, la directiva azul busca la reacción de un equipo que desde el comienzo de la competición vaga por la zona de peligro de la tabla, sin conocer aún la victoria.

El nuevo entrenador ya está al mando de las operaciones y esta mañana ha dirigido la primera sesión en El Requexón. Allí, en la ciudad deportiva, ha conocido a sus nuevos pupilos y ha comandado una sesión basada principalmente en la pelota y que ha servido como toma de contacto. Junto a él llega un segundo técnico, Domingo Cisma, y se espera que se pueda concretar la incorporación de un preparador físico para el grupo de trabajo diario.

Ahora, sin tiempo para la adaptación, Carrión deberá planificar el choque de su estreno, será el domingo ante un Valladolid que es uno de los gallitos de la categoría. Para planear esa cita, el nuevo entrenador solo dispondrá de dos sesiones en El Requexón, lo que parece insuficiente para que pueda verse plasmada su idea, pero que puede servir para que los futbolistas se enganchen y el equipo reciba un soplo de aire fresco. Buscará el Oviedo su primer triunfo del curso y lo hará con nueve bajas, otra dificultad para Carrión: Rodri Tarín, Álex Millán, Mario Hernández, Lucas Ahijado, Romario Ibarra, Alemao, Camarasa, Santi Cazorla y Luismi.

Despedida de Cervera

Carrión sucede a un Cervera que no ha podido mantener la línea de resultados exitosa que sí alcanzó la temporada pasada, cuando sacó al equipo del atolladero para dejarlo en la zona noble de la tabla. Esta campaña no ha podido ser igual. Algunas horas después de conocer la decisión de la entidad, el entrenador escribió una carta de despedida:

“Queridos oviedistas. En el fútbol y en la vida las cosas no siempre son como nos gustaria y hoy llega para mí el triste momento de la despedida del Real Oviedo. La pasada temporada afronté junto a mi cuerpo técnico el reto de reconducir la situación del equipo, creo que lo logramos y además fuimos capaces de generar ilusión. Esta temporada afrontábamos el reto de seguir haciendo crecer al equipo, pero las circunstancias han sido adversas desde el primer momento.

El fútbol muchas veces es caprichoso y las cosas no salen como se espera o como se merece. En cualquier caso quiero dejar claro que para mí ha sido un honor entrenar a este equipo, que he disfrutado de momentos muy emocionantes y que siempre estaré agradecido con el club. Espero que algún dia este equipo pueda volver a donde se merece y estaré junto a los oviedistas para celebrarlo. Quiero dar las gracias a todo el oviedismo, a la ciudad que me acogió desde el primer momento y a todos en general por estos meses en losque me he sentido uno más de vosotros. 0s deseo lo mejor en el futuro y ¡Hala Oviedo!”.