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GIRONA

El Girona siempre juega con once

El conjunto de Míchel es el único equipo de la Liga que no ha visto ninguna tarjeta roja

Actualizado a
Cristhian Stuani of Girona FC in action with Inigo Martinez of Athletic Club during the La Liga match between Girona FC and Athletic Club at Estadio Municipal Montilivi in Girona, Spain.(Photo by David Ramirez/DAX Images/NurPhoto via Getty Images)
NurPhotoGetty

La mayoría de los partidos de Primera acaban con 22 jugadores sobre el terreno de juego pero no es ninguna excepción que alguno de los dos equipos acabe con diez. Las tarjetas rojas son inherentes al fútbol y es habitual que todos los equipos vean alguna a lo largo de la temporada. Algunos más que otros, pero es que este Girona no ha visto ninguna. Y eso sí es una excepción: es el único equipo de Primera que ha acabado todos los partidos con 11 jugadores sobre el campo. Curiosamente Míchel, el técníco, sí ha sido expulsado.

Este dato dice mucho, y casi todo bueno, del equipo de Míchel. El primero, evidentemente, que no son un equipo violento. Hacen faltas, como todos, pero estas nunca son de una dureza tal que merezcan la roja. Tampoco en protestas al colegiado. Otro punto evidentemente bueno es que los jugadores del Girona son conscientes que, cuando tienen ya una amarilla, se han de moderar. Pero por encima de todo esto la ausencia de expulsados demuestra que el Girona es un equipo que quiere jugar, que quiere el balón y que aspira a tener la posesión. Cuanto más balón tiene un equipo menos faltas cometerá y eso es exactamente lo que le pasa al Girona. Otro dato que refuerza esta premisa es que el conjunto de Míchel es en cambio uno de los conjuntos de toda la Liga que más faltas recibe.

La poca contundencia en las faltas, de hecho, va más allá de las tarjetas rojas. El Girona tampoco ha perdido a ningún futbolista por acumulación de tarjetas. Hay dos futbolistas con cuatro en su haber, Taty Castellanos y Oriol Romeu, que tarde o temprano verán lógicamente la quinta. Especialmente el mediocentro, pues por su posición en el campo es mucho más probable que acabe viendo una amarilla.