Los clubes esperan que la Federación pase a la acción
Tras el desencuentro existente sobre el control económico que quiere implantar la RFEF, los equipos confían en que el ente federativo establezca una mesa de diálogo.
La crisis abierta en la Primera RFEF se encuentra en un punto muerto. La división existente entre los clubes de la categoría provoca que el modelo de control económico que pretende implantar la Federación, pueda acabar en la desaparición del formato actual de la competición. Los clubes esperan que la RFEF de un paso al frente y se ponga en contacto con ellos para abrir una mesa de contacto y diálogo con la intención de seguir avanzando en los diferentes escenarios que ha generado la competición.
Uno de los objetivos sería aclarar las dudas que tienen los clubes y tratar de seguir avanzando hacia la modernización de la competición si es que finalmente continúa adelante.
La RFEF quiere caminar de la mano hacia un modelo de control económico que mejore la categoría de bronce del fútbol español. La Primera RFEF apenas lleva año y medio en funcionamiento. Es decir, está en una fase que se puede considerar experimental. Por lo tanto, aún hay aspectos a mejorar. La RFEF tiene claro el camino a seguir.
Los clubes quieren entrar en un proceso negociador. Ahí se determinaría si el nuevo modelo que vio la luz hace año y medio, sigue adelante o acaba en fracaso. En este último caso, se volvería al antiguo modelo de la Segunda división B. En Las Rozas se mantienen firmes en su postura de que si no hay acuerdo el proyecto de la Primera RFEF acabaría en fracaso y por lo tanto desaparecería.