Ramos guarda silencio
En la previa de la vuelta de semifinales de Champions no habló el capitán, como acostumbra, consciente de que todas las cuestiones versarían sobre su futuro.
No llegó al duelo contra Osasuna en Liga del pasado sábado en Valdebebas, pero Sergio Ramos sí se apuntó a la vuelta de semifinales de la Champions League contra el Chelsea de este miércoles en Stamford Bridge. Tras completar varios entrenamientos con el grupo, se subió al avión el martes y es de esperar que sea titular en el centro de la zaga madridista, acompañado por Militao. Pero no hubo noticias de él en la rueda de Prensa previa al partido, y eso sí que es novedad.
A lo largo de los años, ha sido frecuente que Sergio Ramos dé la cara antes de estos encuentros decisivos en Europa, en los que la UEFA impone que comparezca, además de los entrenadores, un jugador de cada equipo (antes de las finales, suelen ser dos por escuadra). Así lo hizo antes de la vuelta de semifinales de la Champions 2017-18, ante la Juventus; también, antes de la ida de octavos ante el City el curso pasado; en la vuelta de semifinales de la 2012-13, ante el Borussia, ahí estaba Sergio; y en las finales, como en Lisboa o en Cardiff antes de enfrenarse con Atlético o Juventus, por ejemplo.
No es un rol que le sea ajeno a Ramos; es más, se siente cómodo ejerciendo como portavoz del equipo y así lo ha destacado más de una vez. Sin embargo, llamó la atención que no compareciese antes del Chelsea-Madrid de este miércoles para analizar el que podría ser su último partido de Champions con la camiseta blanca. Precisamente, por ahí van los tiros: Ramos es consciente de que las preguntas en este momento en una rueda de Prensa en la que él participe, incluso tratándose de un encuentro de esta talla, girarían en un porcentaje altísimo en torno a su renovación. Un asunto que, de momento, no quiere tratar.
Ya quedó claro en la presentación de su documental con Amazon, en cuya rueda de Prensa, filtrada a través de la moderadora que leía las preguntas de los medios, se censuraron todas aquellas cuestiones que trataban la renovación de su contrato con el Real Madrid, que finaliza el 30 de junio. Al final del acto, para cubrir el expediente, Ramos comentó que "no hay noticias; cuando las haya, seré el primero en decirlo". Después, en una entrevista con Ibai Llanos en Twitch, profundizó en ese mensaje.
Sin embargo, esta rueda de Prensa previa al Chelsea-Madrid, en la que el jugador designado para hablar ante los medios fue Toni Kroos, era una oportunidad de oro para que Ramos pusiese las cartas sobre la mesa después de que Florentino Pérez hiciese lo propio recientemente en su tanda de entrevistas para comentar la frustrada iniciativa de la Superliga Europea. En dichas entrevistas, el presidente blanco deslizó que Ramos no se había bajado el sueldo este curso como sí han hecho otros compañeros y que es necesario un esfuerzo por parte del capitán para que pueda continuar de blanco.
Ramos, Florentino, los años y el salario
Las circunstancias, además, no le están ayudando: se ha perdido gran parte de los últimos meses de competición, en los que el Madrid ha alcanzado su mejor nivel, y se ha visto que el equipo puede funcionar con otros nombres, como Varane, Nacho y Militao. El francés, sin ir más lejos, también tiene un futuro incierto por delante (es probable que sea traspasado) y eso no le impidió comparecer antes del Madrid-Chelsea de la ida, en el que no dio muchas pistas: "Mi futuro está claro...". Y a todo ello cabe añadir que el Madrid ya ha cerrado, pendiente de anunciarlo oficialmente, la llegada gratis de David Alaba, que deja el Bayern gratis y que puede jugar como central, como lateral y como mediocentro.
A menos de dos meses de finalizar su contrato con el Madrid, las negociaciones siguen en punto muerto. Ramos quiere al menos dos temporadas para seguir de blanco, mientras que en el club apuestan por renovar año a año dado que ya supera los 35. El asunto del recorte salarial no será un problema si el Madrid amplia su oferta a dos temporadas, pero Florentino fue poco optimista al ser preguntado por el asunto en 'El Chiringuito': "Yo le quiero mucho, pero estamos en una situación muy mala y en el Madrid no pone nadie el dinero...".