El 'defecto' de Nagelsmann que preocupa en el Bayern

El fichaje de Julian Nagelsmann para dirigir el Bayern la próxima temporada no ha dejado indiferente a nadie. Llega con la presión de ser el técnico más caro de la historia del fútbol, ya que le conjunto bávaro ha desembolsado 25 millones al Leipzig para poder hacerse con sus servicios. Ese fichaje récord, ser de los entrenadores más jóvenes y con mayor proyección de crecimiento hace que se creen muchas expectativas sobre él, pero también hay ciertas dudas que afloran sobre su llegada y si es el idóneo para el banquillo del Bayern. Lothar Matthäus ha sido el primero en mostrar su preocupación y apuntar el defecto que tiene Nagelsmann.

“Es un entrenador muy joven pero a la vez maduro y genial. Lo demostró en Hoffenheim y especialmente en Leipzig. Permite un gran y exitoso juego de fútbol, es extremadamente táctico y definitivamente tiene el trabajo del Bayern de Múnich en la cruz", explica Matthäus en su columna en 'Sky'. Pero, añade y resalta: "Pero y es un hecho, aún no ha ganado un título".

Sin todavía haber terminado esta temporada, a Nagelsmann ya le están advirtiendo de que los objetivos del Bayern no son los mismos con los que ha triunfado en Leipzig y Hoffenheiim. En Baviera solo cuentan los títulos y más títulos. Pesa que en las vitrinas de su casa, pese a ser el entrenador de moda, no tenga ningún título, pero eso es algo que puede cambiar y antes de que llegue al Bayern. Está a dos pasos de conseguir el primero. Este viernes juega las semifinales de la Kopal ante el Werder Bremen. Una oportunidad para llegar en verano al Bayern no solo como un entrenador de moda, sino también de éxito y con un trofeo bajo el brazo.

Matthäus también apuntó en su columna que lamenta la salida de Hansi Flick del banquillo del Allianz Arena: "Personalmente, sigo pensando que deberíamos habernos sentado más a menudo y con más sensatez y haber tenido discusiones orientadas a la solución. Desafortunadamente, tengo que hacer esta acusación a todos los involucrados en el Bayern. Un técnico que encaja tan bien con el club, el equipo y la afición debe de alguna manera estar satisfecho sin renunciar a la autoridad para actuar".