El Atleti B se juega su futuro
Los jugadores del Atlético B antes de un partido.

ATLÉTICO DE MADRID

El Atleti B se juega su futuro

El segundo equipo rojiblanco trabaja por no bajar dos categorías después de haber peleado por el ascenso a Segunda las dos temporadas anteriores.

El Atlético B se encuentra en un momento crucial para su futuro. Tras dos temporadas consecutivas disputando el playoff de ascenso a Segunda División, el equipo se ha metido en un gran lío en plena reestructuración de la competición. Las múltiples bajas de jugadores fundamentales, la falta de gol y la pérdida de muchísimos puntos en los minutos finales de los partidos acabó provocando que el conjunto rojiblanco finalizase en la octava plaza del Grupo 5 de Segunda División B. Algo que conlleva caer a la Segunda RFEF y tener que pelear por no hacerlo a la Tercera. Estuvo cerca de evitarlo en la última jornada de Liga regular, pero sólo valía ganar al Navalcarnero y, pese a adelantarse en el marcador, el empate final fue insuficiente para intentar estar la próxima temporada en la Primera RFEF, categoría consecutiva a la Segunda. En la ida contra el propio Navalcarnero se había producido uno de esos fenómenos paranormales del equipo en los tiempos de descuento, encajando el gol del empate en el 97'… por medio del portero Aitor González.

Los jugadores del Atleti B celebran un gol en su último partido contra el Villarrubia.
Ampliar

Los jugadores del Atleti B celebran un gol en su último partido contra el Villarrubia.

El Atlético pelea ahora para que esta temporada de pesadilla sea un mal menor y no arrastre al equipo a la Tercera RFEF. Para ello, comparte grupo con Las Rozas, Poblense y Getafe B, a los que no tiene que volver a enfrentarse y se verá las caras con Melilla, Villarrubia, Socuéllamos y Villarrobledo en una nueva fase muy exigente, porque de los ocho participantes bajarán cinco. También cae el peor de los terceros. Es decir, sólo ser primero y segundo asegura mantenerse en la Segunda RFEF. Eso sí, el Atlético partió la nueva fase con los 19 puntos que había sumado en Liga (el cuarto con mejor balance, a cuatro puntos del Melilla, primero) y derrotó al Villarrubia por 0-2 tras haber iniciado el playoff de descenso cayendo contra el Socuéllamos (0-1). Un brote de coronavirus en la plantilla conllevó la suspensión del encuentro contra el Melilla. Con un cambio de entrenador de por medio, ya que Antonio Rivas sustituyó en el banquillo a Nacho Fernández tras el duelo ante el Socuéllamos, el Atleti B peleará hasta el final por quedarse en la cuarta categoría del fútbol español. El club rojiblanco ha comenzado una fase de profunda reestructuración en los cargos de gestión de su fútbol base y ha prescindido de varios de los mandos que en los últimos tiempos llevaban las riendas de la cantera.

Un once con 20,7 años de edad media

Un equipo jovencísimo, que sólo mantiene a tres futbolistas de su once ideal de la temporada pasada. El Atleti B de la 2019-20 llegó al parón por la crisis sanitaria del coronavirus como tercer clasificado de su grupo en Segunda B, aunque había comandado la Liga durante buena parte de la temporada y disputó por segundo curso consecutivo el playoff de ascenso a Segunda, cayendo contra el Sabadell en los penaltis y quedando apeado del sueño a las primeras de cambio de la forma más cruel. Y, ante la incertidumbre que rodeaba la posibilidad de disputar esta temporada con relativa normalidad, el Atlético abogó por dar salida a varias de sus principales piezas a equipos de categorías superiores, perdiendo a futbolistas de mucho talento y de mayor experiencia.

Así, y con el refuerzo de varios de sus juveniles que más han despuntado, como Mario Soriano, Giuliano Simeone o Javi Serrano, el Atleti B se ha instaurado como uno de los equipos más jóvenes de la categoría. Su once ideal, según la participación y el crecimiento de ciertos jugadores, podría estar formado por San Román (23 años), Camus (23), Álvaro García (20), Marco Moreno (20) o Joan Rojas (21), Medrano (21); Toni Moya (23), Calavera (21), aunque últimamente Javi Serrano (18) pide paso, Ricard (21), Soriano (hoy cumple 19); Giuliano Simeone (18) y Camello (20). Es decir, un once con 20,7 años de media.

La plantilla del Atleti B

Nombre Edad Posición Dorsal
Miguel San Román 23 años Portero 1
Jaume Valens  25 años Portero 13
Christian Gómez 20 años Portero 23
Álvaro García  20 años Defensa 4
Adrián Corral 18 años Defensa 28
Fernando Medrano 20 años Defensa 21
Marco Moreno 20 años Defensa 3
Sergio Camus 24 años Defensa 2
Joan Rojas 21 años Defensa 5
Ricard Sánchez 20 años Defensa 12
Abde Damar 21 años Centrocampista 7
Javi Serrano 18 años Centrocampista 36
Ismael Gutiérrez 20 años Centrocampista 17
Josep Calavera 21 años Centrocampista 6
Óscar Castro 19 años Centrocampista 16
Toni Moya 23 años Centrocampista 8
Mario Soriano 19 años Centrocampista 24
Nando Gutiérrez 20 años Centrocampista 11
Luis Forcén 20 años Delantero 20
Giuliano Simeone 18 años Delantero 37
Ibrahim Diabate 21 años Delantero 14
Sergio Camello 20 años Delantero 10
Marc Tenas 19 años Delantero 19
Davo Fernández 21 años Delantero 9
Mario Soriano protege el balón durante el partido contra el Navalcarnero.
Ampliar

Mario Soriano protege el balón durante el partido contra el Navalcarnero.

Entre ellos, Camello, San Román, Toni Moya, Ricard y Mario Soriano ya han debutado con el primer equipo bajo el mando de Simeone, todos ellos salvo Moya con minutos esta temporada. Camello es un habitual en todos los entrenamientos del primer equipo y un refuerzo en las convocatorias cuando hay bajas en punta. Aunque este año le ha costado más ver portería (suma tres goles), debutó en Primera con tanto al Levante en la última jornada liguera de la temporada 2018-19 y siempre ha destacado por su olfato y seguridad en el área. En total suma seis partidos 'con los mayores'. Toni Moya ha jugado cinco desde su debut en la temporada 2017-18. San Román ocupó la portería frente al Cornellà, donde dejó dos buenas manos pese a la eliminación. Mismo partido en el que debutó Soriano, puro talento y calidad técnica. Un encuentro de ingrato recuerdo para Ricard, que se marchó expulsado, pero previamente se había estrenado con golazo al Cardassar. En Liga tuvo media hora ante el Levante. Álvaro García, Adrián Corral, Óscar Castro y Calavera han estado citados por el Cholo esta temporada sin llegar a debutar, y su hijo Giuliano Simeone está creciendo a pasos agigantados, hasta situarse empatado como el máximo goleador del equipo con tres tantos.

Talento cedido

El Atlético se ha tenido que reestructurar y renovar tras la salida de muchísimos jugadores de su cantera. Algunos que fueron muy importantes la temporada pasada se desligaron del club, como Óscar Clemente, Dos Santos o Carlos Isaac, pero la gran mayoría militan como cedidos en categorías superiores. Así, nueve futbolistas que ya saben lo que es jugar con el primer equipo están haciendo su erasmus particular principalmente en conjuntos de Segunda División. Y el caso de Manu Sánchez, de Primera. Tras pasar la primera mitad de la temporada a las órdenes de Simeone ya con ficha del primer equipo, la posición de Carrasco como carrilero izquierdo unido a la polivalencia de Hermoso y a la presencia de Lodi le dejaban sin minutos. Osasuna, que había luchado todo el verano para hacerse con sus servicios, consiguió sumarle a sus filas en enero y Manu Sánchez no para de crecer en El Sadar.

Manu Sánchez durante un partido con Osasuna.
Ampliar

Manu Sánchez durante un partido con Osasuna.

En la máxima categoría, pero de Turquía, se encuentra Francisco Montero. La temporada pasada cedido en el Deportivo, jugó hace dos años 14 partidos bajo el mando de Simeone, participando en Liga, Champions y Copa. Ahora milita en el Besiktas, donde ha superado los 1.000 minutos. Al Getafe salieron en verano Víctor Mollejo y Darío Poveda. En el caso de Mollejo, primer debutante de la historia del club nacido en el Siglo XXI, su poca participación con Bordalás le llevó en enero al Mallorca, donde ya se ha estrenado como goleador y busca ayudar al equipo bermellón a subir a Primera. La temporada pasada había acompañado a Montero en el Deportivo. Poveda, que el curso pasado se destapó como goleador con once tantos en sus once partidos con el Atleti B, ha tenido en las lesiones su mayor enemigo. La temporada pasada sufrió una grave lesión de rodilla que dejó al equipo sin su killer, lo que le ha tenido fuera hasta poder debutar con el primer equipo del Getafe en marzo.

Otra de las joyas de la cantera rojiblanca, Rodrigo Riquelme, decidió buscar un destino más lejano. Puso rumbo al Bournemouth de la segunda división inglesa, donde se curte ante la dificultad de hacerse con hueco en el equipo. Un jugador con una técnica individual fantástica. Solano se marchó al Barcelona B, pero una lesión de rodilla no le ha permitido jugar. En enero, salieron otros tres futbolistas capitales para el Atleti B. Borja Garcés, debutante en Primera con gol al Eibar, se marchó al Fuenlabrada, donde se está haciendo con un sitio en el esquema titular y ya suma cuatro tantos entre Liga y Copa. También ha visto portería con el Tenerife Germán Valera, otro de los jóvenes con mayor proyección de futuro. Y Sanabria ya ha superado sus problemas musculares y está preparado para ir sumando minutos con el Zaragoza. Además de estos nueve, que ya saben lo que es vestir la rojiblanca en partido oficial con Simeone, otros jóvenes como Cedric Teguia, Manu Lama, Diego Conde, Salido, Saldaña o Sergio Castel juegan cedidos fuera del club.

El modelo de Koke y Saúl

El gran espejo del primer equipo en el que mirarse porta el brazalete de capitán. Koke debutó con el primer equipo el 19 de septiembre de 2009 en el Camp Nou y ya es el segundo jugador con más partidos en la historia del club. En la Academia desde los seis años, el vallecano ha disputado 495 encuentros oficiales con la camiseta rojiblanca y sólo tiene por delante a Adelardo (550). A sus 29 años es 'one club man' y un referente para cualquier canterano, convirtiéndose en el motor del Atlético de Simeone y el único futbolista que ha vivido toda la etapa del cholismo.

Koke y Saúl, dos símbolos de la cantera.
Ampliar

Koke y Saúl, dos símbolos de la cantera.

A su lado está un Saúl que con 26 años ya ha disputado 330 encuentros oficiales con el Atlético (el decimonoveno que más) y que ha brillado durante años en el centro del campo de Simeone. Aunque esta temporada no pasa por su mejor momento, Saúl ha sido todo un modelo a seguir para cualquier canterano del club. En el caso del ilicitano, el Atlético y el jugador entendieron que la mejor solución para su crecimiento era una cesión al Rayo, donde dejó una gran temporada 2013-14 y comenzó a mostrar su polivalencia compartiendo el centro del campo con el de la defensa. Con el Cholo ha jugado prácticamente de todo, siempre comprometido y dejándose la piel por el equipo.

Atléticos por el mundo

Si Koke y Saúl son los referentes de la cantera en el primer equipo, la temporada comenzó con otro jugador de las categorías inferiores comandando el centro del campo. Un Thomas Partey que salió en el último día de mercado tras haber participado en las tres primeras jornadas de Liga y que es uno de los futbolistas que conocen la Academia del Atlético y que milita en la Premier League. El Arsenal se hizo con los servicios del ghanés pagando los 50 millones de su cláusula cuando se había convertido en un jugador cada vez más importante para Simeone. 

Lucas Hernández, durante el partido de Champions entre PSG y Bayern.
Ampliar

Lucas Hernández, durante el partido de Champions entre PSG y Bayern.

En la temporada 2018-19, Thomas había compartido centro del campo en el Atlético con Rodrigo Hernández. El pivote regresó al club tras haber salido de la cantera en juveniles para marcharse al Villarreal. Su vuelta duró poco, un fantástico año en el que participó en 47 partidos, levantó la Supercopa de Europa contra el Real Madrid y marcó tres goles. Pero el Manchester City pagó su cláusula de 70 millones en verano y ahora es un fijo en el esquema de Pep Guardiola. En la misma ciudad, aunque en el equipo rival, milita David de Gea. El guardameta del Manchester United que esta temporada ha perdido el sitio con Dean Henderson tras nueve años como indiscutible en los reds devils. El guardameta debutó con el primer equipo rojiblanco en septiembre de 2009, pero tras su segunda temporada puso rumbo a uno de los gigantes de Inglaterra.

En Alemania, Lucas Hernández lucha por hacerse con galones en la defensa del Bayern de Múnich. Simeone siempre vio el gran futuro del francés, al que explotó su polivalencia para jugar como central o lateral izquierdo. En su posición secundaria tuvo su primera gran noche, el 7 de enero de 2015 contra el Real Madrid. Se convirtió en titular en la temporada 2017-18 y su gran evolución le llevó al Mundial, donde levantó el título como titular con Francia. Jugaría una última temporada (2018-19) antes de marcharse al Bayern de Múnich con sólo 23 años por los 80 millones de su cláusula. Su hermano Theo no llegó a debutar con el primer equipo del Atlético. Su cesión en el Alavés fue brillante y el Real Madrid superó el importe de su cláusula para que cambiase el rojiblanco por el blanco. Pero su experiencia en el máximo rival no fue buena. Ahora vuelve a destacar en Italia, donde se ha hecho con el puesto en el Milan y ha conquistado a su afición por su gran aportación ofensiva, aunque sigue sufriendo en defensa.

Álvaro Morata celebra un gol con la Juventus.
Ampliar

Álvaro Morata celebra un gol con la Juventus.

Otro jugador que vistió la camiseta del Atlético y del Real Madrid es Álvaro Morata. Salió de la cantera rojiblanca a la madridista, pero tras debutar en Liga con el Madrid y jugar también en Juventus y Chelsea, regresó al equipo que según ha explicado Morata es el que siempre ha tenido en su corazón. Anotó 22 goles en el año y medio que estuvo en el Atlético antes de salir cedido a la Juventus, donde está cuajando una buena temporada y parece que la idea de las tres partes es que continúe jugando en la Serie A.

En la liga francesa milita Caio Henrique, que pasó por la cantera colchonera antes de mostrar su mejor versión en Brasil y, después de que el club le recuperase, salió traspasado en verano al Mónaco, donde se ha hecho con el sitio en el lateral izquierdo y en pleno crecimiento. En Inglaterra también milita Manquillo, en el Newcastle; en la Bundesliga, en el Mainz, se encuentra Pierre Kunde; en Italia, en el Sassuolo, Pedro Obiang, todos ellos conocedores del club.

Representantes en LaLiga

Aunque no hay que irse tan lejos, en España varios futbolistas que pasaron por la Academia del Atlético juegan en Primera División. Óliver Torres y Bono (Sevilla), Iván Alejo y Perea (Cádiz), Roberto (Valladolid), Lucas Pérez (Alavés), Joel (Betis), Iago Herrerín (Athletic), Pulido (Huesca) o Miramón (Levante) militan en LaLiga. En Segunda División se puede ver en el Leganés a Borja Bastón, Rubén Pérez y Cuéllar, en el Málaga a Joaquín Muñón, Keidi e Iván Calero, Mario Suárez en el Rayo, Amath en el Mallorca, Óscar Clemente (Las Palmas), Samu Sainz (Girona) o Pedro (Nàstic).

Aunque el canterano que más ha expandido la bandera rojiblanca por el mundo ha sido Fernando Torres, todo un ídolo y que tras salir del club en 2007 para brillar en el Liverpool y seguir acumulando títulos en el Chelsea, regresó al Atlético en enero de 2015 previo paso testimonial por el Milan y pudo levantar su primer título (la Europa League) con el equipo de su corazón. El Niño se retiró en Japón, en el Sagan Tosu, tras una carrera marcada por los éxitos y su sentimiento rojiblanco. También Gabi dijo adiós en una liga exótica, en su caso en el Al-Sadd catarí, después de portar el brazalete de capitán en las grandes noches del cholismo y como uno de los jugadores que mejor ha representado el sentimiento atlético sobre el césped.

Segunda plaza en Segunda División

El Atleti B pelea hoy en día por no caer a la quinta categoría del fútbol español, pero hace no tanto llegó a asentarse en la segunda. Si en estas dos últimas temporadas ha luchado el playoff de ascenso, en 1996 consiguió por última vez subir a la categoría de plata. Y si no fuese por el dramático descenso del primer equipo en el año 2000, que arrastró al filial a Segunda B pese a que por resultados había logrado la permanencia, su etapa podría haber sido más larga. Y es que el Atleti B tuvo unos años gloriosos. Tras dos primeras temporadas en mitad de tabla, acabó el curso 1998-99 como ¡segundo clasificado de Segunda División! Con 74 puntos y sólo por detrás del Málaga.

Rubén Baraja celebra un gol al Barcelona con el Atlético.
Ampliar

Rubén Baraja, una de las joyas de aquella camada, celebra un gol al Barcelona con el Atlético.

Su condición de equipo filial le impedía subir a Primera División, pero fue una temporada de ensueño. Sequeiros acabó como segundo máximo goleador de la categoría con 25 tantos, uno menos que Catanha en el Málaga y la plantilla contaba con jugadores que luego harían carrera al máximo nivel como Rubén Baraja, Luis Tevenet, José Juan Luque, Pablo García, Lawal, Gaspar, Fortune o Cubillo. La temporada siguiente se produciría la desbandada en la plantilla, con la oportunidad de jugar en el primer equipo en algunos casos y la salida de varias de las figuras de la plantilla que se habían ganado militar en Primera. Aun así, el Atlético acabaría decimoséptimo, posición que le mantenía en Segunda, pero el descenso del primer equipo, en una plantilla que contaba con Hasselbaink, Molina, Valerón, Kiko, Capdevilla, Aguilera, Solari, Santi, Baraja, Gaspar, Toni, Petete Correa y compañía y que se vio afectada por la administración concursal, acabó perdiendo la categoría, obligando al filial a bajar. Durante esos años en Segunda también pasaron por el Atleti B futbolistas como Santi Ezquerro, Ricardo, Iván Rocha, Casquero o Paunovic.

Tras ese descenso obligado, el segundo equipo rojiblanco había vivido con estabilidad en la Segunda División B, con un breve y cercano paréntesis en Tercera. Dos temporadas en una categoría inferior, en la 2015-16 y la 2016-17, después de varios años en el alambre. No conseguiría el ascenso a las primeras de cambio (acabó cuarto), pero sí lo haría con solvencia en su segundo curso en la cuarta categoría, ganando su grupo con Óscar Fernández en el banquillo y superando a la a la Gimnástica de Torrelavega. Ahora, se enfrenta de nuevo al abismo, pero tiene en su mano la opción de reconstruirse desde la Segunda RFEF o tener que resurgir desde aún más abajo. Mientras tanto, y como el primer equipo, sólo vale el partido a partido.

Back to top