Gabarre da aire al Numancia y a Mandiola

No fue el Langreo de otros partidos. Más apocado, más tímido con el balón y defendiendo, los de Ángel Rodríguez se fueron de Soria con una derrota por la mínuima debido al gol de Gabarre de cabeza. Con un once bien plantado en el terreno de juego, el Langreo no dio trabajo al portero local. El Numancia sacó un total de seis córners en la primera mitad, muchos de ellos provocados por la defensa del Langreo. Gabarre dio un primer aviso a los veinticinco minutos pero su cabezazo desde el área pequeña se marchó alto por poco. La réplica por parte de los hombres de Ángel Rodríguez fue de Davo que corrió la misma suerte que el remate de Gabarre. Las acciones del conjunto asturiano iban siempre por banda derecha con Miguel Santos doblando a su interior y buscando el centro pero la mayoría no terminaban de llegar al área por bloqueo local o por tirar la diagonal. El gol local llegaría tras un buen centro de Lillo desde banda derecha, rematando de cabeza Gabarre y logrando tanto el primer gol del partido así como el primero en su cuenta personal esta temporada. El tanto no obligó al Langreo a modificar nada.

Tras el descanso, Mandiola dio salida a Tamayo pero tan sólo tuvo una ocasión y ya. No fue ni mucho menos un revulsivo para los suyos y es que Langreo dio un paso adelante mientras que los miedos locales y del propio Mandiola hicieron que el Numancia cambiara a tres centrales, todo por aguantar un resultado mínimo ante un Langreo que no había demostrado ocasiones ofensivas. Álvaro Gómez golpeó desde la frontal pero se marchó desviado. Se veía con más ganas al equipo visitante en la segunda parte que en la primera. Cambios habituales de Ángel Rodríguez dando entrada a De Baunbag y Allyson. Los últimos diez minutos fueron de agobio para los rojillos. No por ocasiones claras del Langreo sino por ellos mismos y su miedo. Un tímido disparo de Jesús Puras fue la última oportunidad para el Langreo pero fue fácil para Miralles. El Numancia se llevó los tres puntos que son como una botella de oxígeno para el equipo y el propio Mandiola quien acabó en el descuento haciendo cambios para ir perdiendo tiempo.