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REAL MADRID

Kroos: "Mi deseo es finalizar mi carrera en el Real Madrid"

El alemán concedió una entrevista a la revista GQ: "Raras veces me pongo nervioso sobre el terreno de juego. He comprobado que la serenidad es una gran ayuda".

Actualizado a
Kroos, en un partido con el Real Madrid.
SERGIO PEREZREUTERS

Toni Kroos, centrocampista del Real Madrid, dio una extensa entrevista al rotativo GQ, en la que desveló su deseo de colgar las botas en el Santiago Bernabéu. También habló de más temas como su experiencia durante el confinamiento, las consecuencias del coronavirus para el mundo del fútbol y la labor de su fundación. También admite el campeón del mundo con la Mannschaft en 2014 por qué se siente, en parte, español. Lea aquí la entrevista íntegra:

¿Cómo vivió el confinamiento junto a su familia en Madrid?
Aquí en España se levantó un confinamiento estricto, las personas no pudieron salir de sus casas durante semanas. Para nosotros fue maldición y bendición a la vez: yo no tengo ningún problema de estar encerrado en casa. Al final, justo eso es lo que más eché de menos durante los últimos años por culpa de tantos viajes: estar en casa junto a mi familia. Aun así fue una sensación diferente a la que uno pueda tener quizá al finalizar la carrera porque toda esta situación estaba en un contexto feo. Porque mucha gente sufrió.

¿Qué percibió de la situación en España?
Allí donde vivimos, a las afueras de Madrid, un pelín resguardados, no percibes demasiado lo que ocurre en la ciudad y te enteras, sobre todo, por las noticias. Está claro que somos unos privilegiados dentro de esta situación al tener una casa grande con jardín, algo que millones de personas, con tres críos como nosotros, hubieran deseado al vivir en un piso en el centro sin poder salir. Por tanto, fue absolutamente llevadero.

¿Cómo pasó el tiempo libre en casa?
No se te hace largo con tres niños. Mi hijo mayor y mi hija acuden a un colegio americano aquí en Madrid, mi hijo está en primero y mi hija en la guardería. Los dos recibieron tareas online, de lunes a viernes. Fue algo que también ocupó mi tiempo, ser una mezcla entre papá y maestro. Las tareas son en inglés, con lo cual incluso yo pude aprender alguna que otra cosa. Además, también tenemos un hijo de un año que no es tan independiente y necesita nuestra atención.

Kroos, protagonista en la portada de GQ.
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Kroos, protagonista en la portada de GQ.

¿Se considera un padre severo?
Les suelo dejar pasar algunas cosas, pero sentimos la exigencia de convertir a nuestros hijos en personas simpáticas y educadas. Estamos muy atentos a que siempre saluden. De vez en cuando me doy cuenta de que otros niños no consiguen hacerlo, es algo que me molestaría como padre. En líneas generales, espero de mis hijos que hagan caso, algo que no siempre se da. Entonces se lo repetimos, la primera vez de manera más amable y la segunda, menos. Por lo demás, tienen una vida maravillosa. No solo en lo material, algo de lo que no son ni deben ser conscientes.

¿Aprovechó el tiempo para probar cosas nuevas? Jürgen Klopp, por ejemplo, aprendió a atarse una corbata.
Tampoco hubo tanto tiempo para probar cosas nuevas. Al final, no puedo plantar a los niños en una esquina y decir: ahora me tomo un tiempo para mí. Es un curro de 24 horas diarias; pero, a la vez, el más bonito. Cuando los niños duermen por la noche, solemos estar reventados. Eso sí, he descubierto un deporte nuevo. Para mantenerme en forma durante el tiempo sin entrenamientos me pedí un saco y guantes de boxeo. Lo probé con la ayuda de una aplicación. Al principio pensé que podía hacer un poquito más y me pasé cada nivel en unos pocos días. Me sentí bien en un primer momento. Eso sí, cuando me levanté al día siguiente, casi se me caen los brazos. Mis manos estaban tan hinchadas que pasé varios días sin poder llevar mi anillo de matrimonio. Fue tremendo. Pero también divertido. Después, también intenté ser creativo. Junto a mi hermano he creado un podcast, “Einfach mal Luppen“, que existe desde mayo.

Sobre el terreno de juego es un estratega, racional y analítico. ¿Ayuda en esta fase?
Está claro, pero he de decir que la cosa no pinta mucho peor para muchas personas que para mí. Tan solo hay que tener en cuenta el estilo de vida: no necesito estar todo el día por ahí, ir al café o salir por la noche. Son cosas que ni siquiera hago en mi día a día normal, cuando todo está abierto. Por tanto, el cambio no fue tan difícil para mí. Tampoco tengo que preocuparme, a diferencia de mucha gente que ven en peligro sus puestos de trabajos o negocio, por el aspecto económico.

Siempre da la impresión de estar en paz consigo mismo. ¿Cuándo se pone nervioso?
Raras veces sobre el terreno de juego. Para ello, he vivido demasiadas cosas y he comprobado que la serenidad es una gran ayuda en multitud de ocasiones. Los éxitos también te dan cierta tranquilidad y la conciencia de que ya no te pueden afectar demasiadas cosas. Alguien me dio esa capacidad, pero no sé quién. En cualquier caso, no fue nadie de mi familia, ya que siempre me entero de lo nerviosos que están todos delante del televisor los días de partido. También está claro que, fuera del ámbito futbolístico, hay días en los que me pueden los nervios y las emociones. Cuando nacieron mis hijos, por ejemplo. Ahí no puedes influir o ayudar y tienes que cruzar los dedos por que todo salga bien. Es mucho más desagradable que estar sobre en terreno de juego.

"Rara vez me pongo nervioso sobre el césped"

Kroos

¿De qué manera lidia con situaciones difíciles?
En el fútbol confío en mis capacidades. Si tienes confianza en tus capacidades, automáticamente sientes más confianza en ti mismo y estás más tranquilo. No es algo de lo que puedas autoconvencerte, tienes que interiorizarlo en las respectivas situaciones. También es cuestión de carácter, hay cierto tipo de cosas que no puedes aprender. Sin embargo, el nerviosismo tampoco es algo puramente negativo. Lo fundamental es cómo alcanzar un efecto positivo.

Siempre da la impresión de tener el control sobre sí mismo. ¿Cuándo levanta la voz y enfurece?
Cierto, la mayoría de veces es así. Pero cuando tengo la impresión de que mi equipo esta siendo injustamente desfavorecido por parte del árbitro, entonces sí que suelo levantar la voz. La injusticia es algo que me cabrea bastante. Tampoco soporto que me mientan. Prefiero una verdad desagradable. Por supuesto que también me cabreo y me emociono, eso sí, quizá con un pelín más de retraso que otros.

En España se le tacha del típico alemán. ¿Lo es?
Quizá desde la perspectiva española, desde la alemana seguramente sea bastante español. Los españoles son un pelín más relajados y pienso que yo también me he convertido en una persona más relajada. También sigo siendo un aficionado de la absoluta puntualidad, algo que se lleva con más margen aquí. Llegar diez minutos más tarde es la puntualidad habitual aquí. Cuando me presento con tres minutos de antelación a una reunión del equipo suelo ser el primero, si lo hiciese en Alemania sería de los últimos. Los españoles también suelen abrazar y besuquear a todo el mundo, tampoco soy ese tipo de persona. Quizá sea un pelín alemán para eso, lo que no quiere decir que no aprecie al otro simplemente porque no me guste ese contacto corporal extremo.

Desde 2015 regenta la fundación Toni Kroos, con la que ayuda a niños enfermos y a sus familias, en parte también en casas mortuorias. ¿Cómo lo vivió durante la crisis?
En algunos hospicios infantiles mandaron a los empleados a casa y nosotros pusimos ordenadores portátiles a su disposición para que pudiesen seguir haciendo su trabajo desde casa, algo que también beneficia a los niños. Durante el pico ofrecimos la posibilidad a, prácticamente, todas las familias que apoyamos de elegir juguetes de regalo y se los mandamos. Los días en casa pueden ser muy largos, y más cuando tienes a un niño enfermo. Nuestra intención es hacer todo más ameno.

"Desde la perspectiva alemana, quizás sea muy español"

Kroos

¿Cómo le marca su labor con los niños?
Muy intensamente. Me demuestra que el mundo en el que vivo no es el normal y que hay problemas de mayor relevancia que ganar un partido de fútbol. Hubo días en los que me cabree por una derrota o banalidades como cuando alguien llegó tarde o se rompió algo en casa: cosas sin importancia. Después, me pongo a leer por la tarde las peticiones a la fundación y me doy cuenta de tantas circunstancias que se dan en la vida, que vuelven a enderezarme y me enseñan los problemas, verdaderamente graves, que sufren otras personas. Es un gran soporte para mí.

¿Algún caso que le haya conmovido en especial?
A una niña de Berlín le quedaba el deseo de montar en helicóptero. Era de prever que no iba a vivir mucho más. Le regalamos el vuelo, lo hizo y, desafortunadamente, falleció al poco tiempo. Son desenlaces que te conmueven y hacen pensar. A posteriori, me alegro de poder haberle hecho pasar esas bonitas horas.

Este verano debía tener lugar la Eurocopa, pero fue aplazada a 2021 por el coronavirus. Es el último gran título que le falta.
Le doy importancia, pero a ganar una Champions más, también. No tiene nada que ver con cantidad. Es un título importante y quiero ganar cada campeonato en el que participo. La motivación siempre es altísima ante un torneo como la Eurocopa y no creo que un año de retraso nos afecte, al contrario, quizá nos venga bien que se juegue en 2021. A algunos lesionados que estarán de vuelta para entonces y a la evolución general del grupo.

¿La pandemia influirá de manera persistente en el fútbol o volverá todo a la normalidad?
No creo que se dé tan rápidamente, las pérdidas son demasiado grandes. No se desembolsarán semejantes cantidades a corto plazo y algunos clubes tendrán que encontrar fórmulas nuevas para seguir siendo competitivos. En cuanto a pagos por fichajes y sueldos, se intentará regatear y tener más cuidado de lo que se puede gastar. Pero se volverá al punto de antes de la crisis. Tiene que ver con la competitividad a día de hoy, con la presión desmedida por ganar, también debido a los medios. Si existe la posibilidad de volver a desembolsar la misma cantidad de dinero que antes de la crisis, se hará.

"Mi deseo es acabar mi carrera en el Madrid"

Kroos

Le quedan tres años de contrato en el Real Madrid. ¿Qué planes tiene para después? ¿Pasar un tiempo en EEUU como hacen muchos jugadores?
Más bien no, no va con mi forma de ser. En el mundo del fútbol, tres años es un tiempo larguísimo y mi intención es cumplir el contrato. Entonces tendré 33 años y todas las opciones: seguir aquí, hacer otra cosa o finalizar mi carrera. Eso sí, mi deseo es finalizar mi carrera aquí en el Real.

Su padre es entrenador. ¿Sería una opción para usted?
Me imagino con un puesto de trabajo en el fútbol, pero en realidad no de entrenador al máximo nivel. Sobre todo porque volvería a sumergirme una vez más en lo que más me molesta del fútbol: esos viajes, el hecho de no pasar por casa durante semanas. No me gusta. Pero me imagino haciendo algo en la cantera, transmitiendo mi experiencia. Lo que sí considero importante es el hecho de poder diseñar mi día a día yo mismo. A los futbolistas nos imponen tantas cosas: que tengo que dormir en el hotel, cuándo he de comer y entrenar. Siento ilusión por la independencia que tendré después.

"No sé si daría el consejo de declararse homosexual a un futbolista en activo"

Kroos

¿Cómo ha cambiado el fútbol durante los últimos años?
La cobertura informativa cada día es más extrema, no existen los matices, solo muy bueno o muy malo. Siempre se busca el mismo titular cuando los futbolistas dan entrevistas. Puedo convivir con ello bastante bien y sigo expresando mi opinión de forma clara. Sin embargo, entiendo a todos los jugadores que miden sus palabras. El peligro de que se haga un montaña de un grano de arena está ahí. También se dispararon las cantidades. Lo que se pagaba antes del brote del coronavirus, que seguramente restrinja esas cantidades, no me parecía del todo sano. Se llegaron a pagar hasta 40 y 50 millones de euros por el traspaso de jugadores mediocres. Es lo que costaban las estrellas antiguamente. Pero también se perciben evoluciones favorables: el juego es más rápido y, por tanto, más vistoso.

La edición actual de GQ está bajo el lema LGTB. La homosexualidad sigue siendo un tema delicado en el mundo del fútbol, sobre todo teniendo en cuenta que, de momento, ningún jugador se haya declarado abiertamente homosexual.
Mi sentido común me dice que todo el mundo debería vivirlo en plena libertad, no cabe la menor duda de ello. Eso sí, no sé si daría el consejo de declararse homosexual a un futbolista en activo. Sobre el terreno de juego se suelen utilizar ciertas palabras y, teniendo en cuenta las emociones que se llegan a vivir en las gradas, no podría asegurar que no terminaría siendo insultado y menospreciado. No debería ser el caso y estoy seguro de que el jugador, que decida dar el paso, contaría con el apoyo de muchos lados. Eso sí, dudo que sea el caso en el campo ante la afición rival. Cada jugador tiene que decidir por sí mismo si lo considera una ventaja o desventaja, aunque creo que, incluso a día de hoy, no serían todo ventajas.