NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL MADRID

Haaland: así se fabrica un 'killer'

El ariete de moda combina la genética familiar con la ciencia y su sprint es de atleta de 60m lisos. "Ganó 12 kilos de músculo en casi un año", cuenta a AS el preparador que le modeló.

Actualizado a
Haaland: así se fabrica un 'killer'

En la explosión de Erling Haaland no hay nada al azar. Desde que tenía cinco años, su padre, Alf-Inge, exfutbolista en la Premier, y su mamá, Gry Marit, campeona de heptatlón, vieron que tenían algo extraordinario en casa. Era 2006 y el pequeño Erling batió el récord mundial de salto de longitud de su edad: 1,63 metros. Fue el punto de partida de un proceso que le ha convertido, con sólo 19 años, de un chaval "flaquito" en un hercúleo ariete de 194 centímetros y 87 kilos con el sprint (36km/h) de un velocista de 60 metros lisos y una capacidad para el gol casi sobrenatural: 41 goles esta temporada. El objetivo de futuro madridista es un caso de estudio para las facultades de Ciencias del Deporte. AS ha querido indagar cómo se construyó al killer de moda. Un espécimen único...

"Su cuerpo responde tan bien al entrenamiento porque su genética es privilegiada", explica a AS el hombre clave en su desarollo. Borre Steenslid fue el preparador físico que encontró a un desgarbado Haaland de 17 años en el Molde y lo transformó casi en lo que vemos hoy. "Ganó doce kilos de músculo en quince meses", recuerda. "¡Una locura!". Era necesario porque había crecido veinte centímetros muy rápido y su cuerpo estaba desacompasado. "Le construimos una musculatura desde cero...".

Los datos del espectacular desarrollo físico de Erling Haaland.
Ampliar
Los datos del espectacular desarrollo físico de Erling Haaland.

Destrozó un saco en un entrenamiento

Así se hizo y Haaland empezó a generar comentarios en el Molde por su dieta ("Siempre era el más cercano al buffet y su plato era literalmente una montaña de comida"), por sus sesiones extra de velocidad sobre el césped y por las horas que invertía en el gimnasio. "Le diseñé un circuito donde en una de las estaciones tenía que golpear un saco... y un día lo partió por la mitad", rememora Steenslid, que tomó una fotografía de la anécdota, quizá para convencer a los incrédulos. No era el primero que había visto de lo que es capaz Haaland.

"Con 13 años ya vi que ese crío iba a llegar a la selección absoluta noruega", afirma a este periódico Alf-Ingve Berntsen, el entrenador del ariete durante ocho años en Bryne. "Tiene una ética de trabajo y un sentido táctico muy especiales". Pero dar el estirón tan rápido le perjudicó, perdió coordinación y el gol se esfumó. Lo relataba Álex Craninx, exportero madridista que coincidió con Haaland en el Molde, hace poco en AS. "Me dijeron que al subir al primer equipo no metía ni una...". Esa falta de puntería del novato era la comidilla del equipo hasta que un ministage en Marbella y la paciencia de Solksjaer, su entrenador y el actual técnico del Manchester United, obraron el milagro. "Le enseñó a rematar, le convenció de que no tenía que destruir la portería cada vez que chutase y Erling hizo clic...", cuentan en el Molde.

"Con 13 años ya le vi que llegaría a ser internacional absoluto con Noruega. Si yo fuera el Madrid u otro grande europeo, lo fichaba hoy mismo"

Alf-Ingve Berntsen, el entrenador de Haaland en Bryne durante ocho años.

Un carácter perfeccionista que no le abandonó al dejar Noruega. En Salzburgo, donde probó la futurista máquina en 360 grados Soccerbot para mejorar sus habilidades cognitivas, su técnico (el estadounidense Jesse Marsch) tuvo que frenarle tanto ímpetu y le obligaba a irse a casa para evitar lesiones por exceso de entrenamiento. Porque Haaland tiene cara de niño y a veces parece un adolescente (su comida favorita es la pizza kebab) pero su cuerpo es su templo. Es minucioso. Utiliza la meditación para limpiar la mente y gafas especiales para filtrar las luces azules de las pantallas de televisión y del móvil. Con ellas 'activa' la melatonina, duerme mejor y eso le permite resetear sus músculos.

Un físico que no le falló durante el parón. Volvió el sábado y arrasó al Schalke junto al resto del Borussia. Hasta Florentino le mandó un mensaje de felicitación a Hans-Joachim Watzke, el CEO del club amarillo. "Si yo fuera el Madrid o cualquier otro gran club, lo fichaba hoy mismo, es el futuro", dice sin titubear Bertnsen, su primer entrenador. "Su físico impresiona pero aún puede mejorarlo", corrobora Steenslid. Haaland, el ariete que parece un cyborg...