NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL MADRID

Hacienda multa a Sergio Ramos con un millón por fraude fiscal

Según El Mundo, la sanción es por una tributación irregular de sus derechos de imagen de los ejercicios fiscales 2012, 2013 y 2014. El jugador ha recurrido después de pagar.

Actualizado a
Hacienda multa a Sergio Ramos con un millón por fraude fiscal
KEMAL ASLANREUTERS

Sergio Ramos se ha unido a la lista de jugadores sancionados por la Agencia Tributaria por cometer fraude fiscal. El capitán del Real Madrid ha sido multado con un millón de euros por la tributación irregular de sus derechos de imagen, según informa El Mundo.

Dicho diario añade que Hacienda ha levantado un acta al futbolista correspondiente a los ejercicios 2012, 2013 y 2014 en la que concluye que utilizó una sociedad de su propiedad, Sermos 32, S.L., radicada en España, para ceder a la misma sus ingresos publicitarios y pagar menos impuestos de manera irregular.

En la información de El Mundo se destaca que Ramos ya abonó en plazo la cantidad requerida (que comprende la cuota defraudada, la sanción y los intereses, por la vía administrativa). No obstante, ha interpuesto un recurso en el que cuestiona la decisión de la Agencia Tributaria. El futbolista sevillano ha alegado que en todo momento ha cumplido con los criterios de tributación que le fijó Hacienda en una inspección anterior. Y es que al capitán madridista ya le habían reclamado todos los datos de su empresa hace años, concretamente en relación con los ejercicios 2006, 2007 y 2008. Aquel primer requerimiento se saldó con una sanción menor, vinculada con la remuneración que debía cobrar Sergio Ramos de Sermos 32, S.L. al acudir a eventos o grabar anuncios publicitarios.

Por lo tanto, Hacienda reclama a Sergio Ramos los 20 puntos de tributación de los que se ha beneficiado por cobrar sus ingresos publicitarios a través de una sociedad en lugar de haberlos declarado íntegramente como persona física. Es decir, la diferencia entre el 25% que tributó a través de su sociedad frente al 45% que le corresponde en su IRPF.