Con el Clásico aplazado, objetivo Champions para el Barça
El Barça, que meditaba reservar jugadores en Praga, lo dará todo ante el Slavia para liquidar cuanto antes su pase a octavos de final.
Cambio de planes en la hoja de ruta blaugrana una vez confirmado que el Clásico no se jugará el sábado. Ernesto Valverde y Jon Aspiazu tenían la duda ante la semana con partido doble (Champions contra el Slavia y Liga ante el Madrid) de regular a los elementos más decisivos de su plantilla, pero el aplazamiento de la cita contra los blancos lleva al Barça a priorizar la máxima competición europea: objetivo Champions. Mucho más después de que este último fin de semana el equipo blaugrana volviera a tomar el mando de la clasificación de LaLiga tras un inicio muy irregular.
Y es que el Barça se encuentra ante la oportunidad de dejar casi totalmente encarrilada su clasificación para los octavos de final de la Champions en caso de derrotar antes del parón de noviembre al Slavia en Praga este miércoles y el próximo martes en el Camp Nou.
Hasta ahora, el Barcelona ha empatado su partido en Dortmund y ha ganado al Inter en casa, por tanto, de superar al Slavia en su doble enfrentamiento en quince días, tendría casi en la mano el pase a la siguiente fase.
Algo que se considera fundamental en el despacho de los técnicos del Barcelona porque el calendario tras el parón de noviembre, a causa precisamente del aplazamiento del Clásico, se ha vuelto infernal.
El noviembre y diciembre del Barcelona una vez consumido el último parón por calendario FIFA del año depara para los de Valverde las visitas al Wanda Metropolitano, Giuseppe Meazza y Anoeta mientras que visitarán el Camp Nou el Borussia Dortmund y el Real Madrid. A priori, más sencillos parecen los compromisos ante Leganés, Mallorca y Alavés, aunque es en estos partidos insospechados donde ha pinchado el Barcelona en su irregular arranque liguero.
Como ejemplo principal del cambio de estrategia, el Barça pondrá toda la carne en el asador este miércoles en Praga en busca de tres puntos clave sabiendo que el fin de semana no tendrá al Real Madrid delante.
De momento, el Barça ha demostrado que estos quince días de parón le han servido para cargar pilas y ofrecer en Ipurúa una imagen muy cercana a la que se espera del equipo. Un conjunto que va tomando su velocidad de crucero y que está haciendo la pretemporada que le tocaba en verano en pleno otoño. Y eso se empieza a notar. Falta les hará ponerse a tono porque el último tramo del año será la primera etapa reina de la temporada.