Mina rescata un punto en la última jugada
El ariete anotó en la última acción. Pedrosa adelantó al Espanyol y Pipa perdonó el segundo en el 90'. El punto mantiene a ambos equipos en la zona baja de la tabla.
Salió el Celta en tromba a por el partido, con una presión alta asfixiante y una rápida combinación cerca del área espanyolista. Rafinha, Aspas y Denis empiezan a entenderse a las mil maravillas y eso es una mala noticia para cualquier rival. Mina no deja de porfiar, Olaza es una máquina de poner centros perfectos y Lobotka sabe lo que hacer en cada momento. Así, el Espanyol se vio superado por los acontecimientos, no paró de achicar agua en la primera parte y sólo la falta de puntería celeste les permitió llegar con el empate al descanso. Porque Mina tuvo un gol cantado al cuarto de hora, pero el balón no quiso entrar. Porque Rafinha sacó su zurda a pasear a la media hora, pero el balón no quiso entrar. Porque Araujo se inventó un cabezazo imposible, pero el balón no quiso entrar. Y porque Mina no llegó a un centro de Aspas que sólo había que empujar. Eso fue lo que dio oxígeno a los pericos, que recibieron el descanso como agua de mayo.
Los visitantes agradecieron el parón entre los dos actos para coger fuerzas. A los tres minutos de la reanudación lograron adelantarse en el marcador gracias al tanto de Pedrosa, quien aprovechó un regalo de Calleri para marcar a puerta vacía. El golpe fue duro para el Celta, que se quedó noqueado y estuvo a punto de pagarlo caro en la siguiente jugada. De nuevo gozó Pedrosa de una oportunidad, pero en esta ocasión Rubén le negó la gloria. En el tramo final los vigueses se lanzaron a la desesperada en busca del empate, con mucho corazón y poca cabeza, pero no encontraban huecos entre la zaga perica. De hecho, la única ocasión de la segunda parte llegó a cargo de Aspas, quien probó suerte casi sin ángulo y no acertó a encontrar portería.
En el último minuto del partido, con el Celta totalmente volcado, el Espanyol tuvo un contragolpe de oro para liquidar el choque. Era cuatro contra Aidoo y Rubén y sin embargo ganó la batalla el portero, despejando el disparo de Pipa. De esa jugada seguro que todavía se están lamentando en el vesutario espanyolista porque el Celta consiguió empatar en la última jugada del partido. Centro de Mallo y cabezazo inapelable de Mina a la red. Los vigueses rescatan un punto sobre la bocina y evitan que Gallego respire con mayor tranquilidad.
Gallego
El entrenador del Espanyol David Gallego, lamentó que a su equipo se le "escaparan dos puntos" en la última jugada del partido contra el Celta de Vigo, pero dijo estar muy contento por el "partidazo" que hicieron sus futbolistas.
"Tenemos que intentar ser más contundentes pero eso no se puede exigir. No voy a sentenciar a nadie por esa acción. Otro día nos tocará ganar o empatar en el minuto 95. No voy a hacer responsable a nadie. El equipo ha hecho un partidazo en todas las facetas", declaró en rueda de prensa.
Gallego aseguró estar "muy triste" por el resultado, pero insistió en que el gol del Celta llega con un centro "muy profundo" y luego Santi Mina hace "un gol espectacular".
"He metido al equipo atrás o nos han metido atrás", respondió el técnico del Espanyol cuando se le preguntó si con los cambios había metido a los suyos en campo propio: "Soy muy ofensivo pero sé que los jugadores se fatigan y se cansan. Hemos defendido muy bien salvo en esa última acción en la que, sin hacerlo mal, nos meten un golazo".
A pesar del "mazazo" que supuso el empate en el tiempo de descuento, Gallego se mostró ""súper convencido" de que el equipo "va a tirar para arriba" y va a hacer "una buena temporada".
Escribá
Fran Escribá, entrenador del Celta de Vigo, consideró "justo" el empate ante el Espanyol a pesar de que el gol llegó en la última acción del partido con un gran cabezazo de Santi Mina, aunque también se mostró crítico con su equipo porque en la segunda parte "estuvimos mal, muy espesos".
"Los segundos 45 minutos fueron los peores de la temporada, afeamos lo que el equipo hizo bien en la primera parte. No es día de destacar a uno, quizás el trabajo de Fran en el centro del campo o de los centrales. El empate no es injusto haciendo un análisis del partido porque generamos más, sobre todo en la primera parte", declaró.
El técnico del Celta afirmó estar "satisfecho" por el empate pero no "con el juego", e insistió en que necesitan ser más profundos: "No podemos ser un equipo que juega bien, que se asocia, que llega con facilidad al área rival y luego no acabar esas jugadas. Lo hemos hablado entre nosotros, incluso en el descanso de hoy".
Escribá no quiere hablar de Europa, "en la sexta jornada es una barbaridad hablar de eso", pero él es ambicioso y está convencido de que harán "una gran temporada".
Preguntado por la remontada del Eibar, al que visitarán este domingo, ante el Sevilla, dijo: "para nosotros es mejor que hayan ganado ese partido porque nos alerta de lo que nos vamos a encontrar allí. El Eibar nos va a llevar a un nivel de exigencia máxima".