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CHAMPIONS LEAGUE

El Madrid se pierde sin Ramos

Las últimas cinco veces que ha salido a la Champions sin su capitán, ha caído derrotado. La del 3-0 en París, además, con Varane y Militao superados.

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El Madrid se pierde sin Ramos

Una puede parecer casualidad, también dos, incluso tres y hasta cuatro, pero cinco ya son demasiadas para pensar en el azar. Son las veces que el Madrid ha perdido consecutivamente en Champions sin Sergio Ramos. La más reciente, el 3-0 en París, destapó las costuras de Varane y Militao, muy flojos como pareja y por separado.

La importancia de un jugador se puede medir en dos contextos: su peso en el campo y el de sus ausencias. Y Europa está demostrando cuánto lastran al Madrid las bajas de Ramos: las últimas cinco noches sin él no pudo ni rascar un empate. La mala racha nació en la 2017-18, con aquel agónico 1-3 de la Juventus en el Bernabéu que casi deja a los de Zidane sin el pase a semifinales. Y continuó en la 2018-19, con la doble derrota ante el CSKA (1-0 y 0-3) y el trágico 1-4 de la eliminación en octavos contra el Ajax (1-4), muy comentado porque pilló al de Camas en un palco grabando la serie-documental sobre su vida. Aquel partido no lo pudo jugar por haber forzado en Ámsterdam la amarilla que le acarreaba suspensión para la vuelta, mismo motivo por el que no apareció por el Parque de los Príncipes este miércoles.

Varane y Militao no funcionaron

El fin de semana previo al PSG había acabado en aviso, aunque haya resultado en balde. Zidane retiró a Ramos en el 60', con 3-1, y el Levante marcó el 3-2 en el 75' y exigió un paradón de Courtois para no amargarle otra tarde al Bernabéu. Ahí se empezó a ver que el experimento de Zizou, obligado por la baja del capitán (el olvidado Nacho también estaba sancionado para París) a probar el Varane-Militao, no ofrecía muchas garantías.

Los dos centrales naufragaron en la primera gran noche de la temporada, vendidos por su poca contundencia, por sus desatenciones y por el espacio hasta Casemiro que tanto explotaron los chicos de Tuchel, que también entraron como por casa entre ellos y sus respectivos laterales, Carvajal y Mendy. Todos esos errores, en ocasiones al mismo tiempo, quedaron de manifiesto en los tres goles locales.