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FRANCIA

Los cinco centrales con más futuro del fútbol francés

Año tras año, en la Ligue 1 no dejan de emerger centrales jóvenes, y esta sucediendo temporada tras temporada.

Actualizado a
William Saliba.
JEAN-PHILIPPE KSIAZEKAFP

Si tuviéramos que elegir un país donde mejor se forman los jugadores que ocupan el centro de la defensa, sin ningún género de dudas sería Francia. El país galo se ha erigido como el mayor productor de centrales del mundo, exportando, temporada tras temporada, a los mejores defensas de su campeonato. El último caso es el de Jules Koundé por el Sevilla, pero no debemos olvidar a Ibrahima Konaté, Upamecano, Clement Lenglet, Samuel Umtiti o, en su día, a Raphaël Varane.

Con William Saliba ultimando su marcha al Arsenal, Francia vuelve a ser el punto de atención del mercado por la ploriferación de defensas. En este artículo se analizan los cinco centrales con mayor proyección en la actualidad en la Ligue 1 .

1. William Saliba (AS Saint-Étienne)

William Saliba emergió en la Ligue 1 de forma espectacular. Con tan solo 17 años debutó en la pasada Ligue 1, y en 2019 se convirtió en titular por su gran potencial. Salvando las distancias, nos recuerda al Varane que salió del RC Lens. Central inteligente, decidido y tranquilo, que intercepta a los delanteros con limpieza sin usar el choque como arma. Además, tiene una salida de balón con superioridad impropia de un jugador de su edad, y por ello el Arsenal tiene casi ultimado su fichaje. Con 18 años ha destacado en el Saint-Étienne, que acabó cuarto en la Ligue 1, lo que nos da pistas del potencial de Saliba.

2. Malang Sarr (Niza)

Lucien Favre le abrió las puertas de la titularidad cuando apenas tenía 17 años y realizó una gran temporada. Sarr ha disputado tres temporadas en Ligue 1 con apenas 20 años y es uno de los proyectos de central de mas proyección del fútbol francés. Bajó su rendimiento en la segunda temporada en el club, coincidiendo con que el equipo se desinfló en la última temporada de Favre, pero la llegada del entrenador Vieira le ha favorecido para explotar sus virtudes técnicas.

Sarr es un central que, a pesar de tener errores en los centros laterales, se ha consolidado como uno de los defensas con mas criterio de Europa para sacar la pelota jugada. Vieira le situaba de “lateral izquierdo”, teniendo en cuenta el sistema de tres centrales, con el objetivo de realizar diagonales hacia dentro y encontrar a los centrocampistas tras superar líneas de pase. En el sistema de tres centrales usado por Vieira hemos visto al mejor Sarr desde su aparición con 17 años en la Ligue 1. Sin duda, un jugador ideal para un equipo que quiera sacar el balón jugado desde atrás .

3. Boubacar Kamará (Olympique de Marsella)

A pesar de que está en uno de los clubes más inestables del fútbol europeo, Kamará se ha convertido en una de las pocas noticias positivas del club phocéen en las últimas temporadas. Un central que emerge en una crisis deportiva en el Olympique de Marseille, mostrando personalidad y potencial para ser uno de los centrales con más proyección de la Ligue 1.

Destacando por su rapidez al corte y la lectura del juego, Kamará afronta otra temporada en el OM con el objetivo de convertirse en el jerarca que lleva tanto tiempo anhelando el club. La debilidad que tiene Kamará es que sufre en el cuerpo a cuerpo pues su complexión es espigada y le falta chispa para anticiparse a delanteros de envergadura. Pero tiene 19 años y ha demostrado personalidad en momentos críticos, y poco a poco las carencias las puede superar con el paso del tiempo

4. Jeremy Gélin (Stade Rennais)

Con 22 años, Jéremy Gelin afronta la presente temporada como una de las más decisivas de su corta carrera. El central, reconvertido en centrocampista defensivo en ocasiones por Lamouchi debido a su excelente salida de balón, debe dar un paso hacia adelante tras la marcha de Mexer del conjunto bretón con destino Burdeos.

Hace dos temporadas, Gelin, como había hecho Kamará, dio un paso adelante en un momento crítico del Stade Rennais. Fue el mejor central en la 2017/2018, por encima de Joris Gnagnon, que acabaría la temporada anunciando su fichaje por el Sevilla. La cualidad mas destacable de Gelin es la salida de balón. Los cortes que efectúa por su lectura táctica los realiza con un primer toque fino y sutil, para habilitar al compañero más cercano en situación de ventaja. Muchos centrales van al corte para enviar la pelota lo más lejos posible del área y Gelin, por el contrario, trata de hacerlo de forma limpia con el objetivo de habilitar a sus compañeros, lo que le ha permitido jugar de pivote y ser un organizador fiable.

A pesar de que ha perdido la titularidad esta temporada, incluso por detrás de otro joven como Gerzinho Nyamsi (1997), Gelin tiene posibilidades de disponer de minutos en la presente temporada. Stephan, entrenador del Stade Rennais, ya ha elogiado su capacidad de jugar con el balón y, en un equipo que mima el esférico como el Rennes, dispondrá de sus oportunidades. En suma, es un central con mucho potencial, aunque no ha tenido la continuidad deseada en el último curso.

5. Harold Moukoudi  (Saint-Étienne)

El canterano del Le Havre se ha convertido este verano en uno de los movimientos más interesantes del fútbol francés. Pretendido por el Sevilla la temporada pasada, Moukoudi, tras varias temporadas a un gran nivel en Le Havre, decidió fichar finalmente por el Saint-Étienne, y probablemente se convertirá en el sustituto de William Saliba en las próximas temporadas.

Moukoudi tiene 21 años y demostró en las dos últimas temporadas que es sin duda el mejor central de la Ligue 2. Su envergadura y espectacular potencia en espacios reducidos han derivado en que sea uno los defensas que más duelos individuales gana del campeonato francés. Además, tiene un desplazamiento en largo que combina potencia y técnica y que han sido decisivos para que el ASSE, con fútbol de posesión con centrales muy definidos en la salida de balón, haya decidido finalmente ficharlo.

Si William Saliba termina cedido otra temporada en el Saint-Étienne tras oficializarse su marcha al Arsenal, él y Moukoudi pueden formar una pareja de centrales de las más contundentes de la Ligue 1. Estamos ante un defensa poco mediático pero que, por potencial, está capacitado para marcar una época en la Ligue 1.