Argentina recibe ahora los palos que sufrió España en 2010
Los elogios de la prensa de Argentina a España han sido unánimes. Contrastan como el día y la noche con lo que se reflejó en esos mismos medios el 7 de septiembre de 2010, cuando la Selección, menos de dos meses después de proclamarse campeona del mundo en Sudáfrica, cayó estrepitosamente (4-1) ante la albiceleste en un amistoso en el campo de River Plate. Del texto sangrante de Crónica: “¡España, por favor devolvé la Copa!”, hemos pasado al explícito “Una trompada en la cara” que escogió ayer La Nación recogiendo, precisamente, la idea que Sampaoli expresó tras el partido del Wanda Metropolitano: “España nos abofeteó”.
En ese lejano partido del Monumental, los argentinos cargaron las tintas con Reina, que fue titular y tuvo un error, un resbalón en el área, con el que se cerró la goleada. Antes del primer cuarto de hora, Argentina ya ganaba 2-0 (Messi e Higuaín). Del Bosque había salido con el portero suplente y una defensa inédita (Arbeloa, Piqué, Marchena y Monreal). La cosa no salió bien. Y fue muy duro. Las barras se arrancaron al unísono: “Mirá, mirá / sacale una foto /se vuelven para España / con el culo roto”.
Pero los piropos a España tras el 6-1 a la albiceleste no han llegado sólo desde Argentina, han llovido desde todos lados del planeta. La Gazzetta dello Sport, desde Milán, aseguró: “Ciclón Isco, Argentina humillada. Derrota sin excusas para Argentina, que sufrió en Madrid una humillación histórica”. Globoesporte, desde Río de Janeiro, fue más explícito: “España humilla a Argentina”. En Buenos Aires, más que centrarse en la excelencia de La Roja, escogieron repartir estopa a los suyos. Época tituló: “Vergüenza Mundial” y el deportivo Olé: “Faltan tres Messis”, combinando el tiempo aproximado que falta para que empiece Rusia 2018 con la ausencia del jugador rosarino, para quien Radio La Red tuvo el mejor de los análisis: “Hay que ser bien conscientes de lo que Leo supone para Argentina. Con él se ha llegado a dos finales de Copa América y a una final del Mundial; sin él España nos ha pegado bien duro. El grupo es el mismo, pero sin Messi el grupo no es igual”.
Casilla a cero. Ahora, críticas y halagos al margen, en lo que coincidieron Lopetegui y Sampaoli en la sala de prensa del Wanda Metropolitano es que “el 6-1 no da puntos en el Mundial. La Copa aún no ha empezado y las dos selecciones tenemos la casilla a cero”.
Pero también es verdad que el partido deja huella, sobre todo porque es fácil que pueda repetirse en el Mundial de Rusia. Si la Selección fuera primera de grupo y supera el primer cruce contra el segundo del Grupo A (Rusia, Arabia, Uruguay y Egipto) el rival en cuartos sería Argentina, siempre que los de Messi fueran líderes y, a su vez, dejaran en la cuneta al segundo del grupo C (Dinamarca, Australia, Francia y Perú). Un recorrido perfectamente posible tanto para España como para Argentina, que buscaría la revancha en Moscú de lo sucedido el martes en el Wanda Metropolitano.
