Al Castilla le pasó un temporal por Majadahonda

El estreno del Castilla en 2018 no pudo ser más gélido. Acudió a Majadahonda en un fin de semana de frío, lluvia y nieve y el temporal que le castigó no fue climatológico, sino futbolístico. El Rayo Majadahonda es, junto al Fuenlabrada, el mejor equipo en estos momentos del Grupo I de Segunda B y el filial de Solari lo sufrió en sus carnes. Los cachorros de Valdebebas cayeron 3-1 y pudo ser bastante peor, porque Brea Peón anuló un gol legal del majariego Dani Martínez por fuera de juego.

El Rayo Majadahonda aúna el buen gusto en su juego con esa pizca de fortuna que distingue a los equipos destinados a jugarse cosas importantes. El 1-0 fue la mejor prueba, toda una espiral de asombro. Javi Sánchez hizo una mala cesión hacia Belman, el despeje de éste dio en la espalda de Chiki, el rebote le cayó a Pichín, que chutó en escorzo, Belman se resbaló al intentar hacer la parada y la pelota golpeó en el poste pero entró. Mejor verlo con la sintonía de Benny Hill de fondo.

El 2-0, cuatro minutos después, conjugó de nuevo el azar con la fragilidad habitual del Castilla a balón parado. El lanzamiento espectacular de falta de Carlitos se estrelló en la cruceta y el rechace le cayó a Chiki, sin marcador alguno a la vista, que solo tuvo que empujarla.

Además, al Castilla le vino mal que hubiera un viejo zorro en el banquillo rival. Iriondo, ex del Rayo de Vallecas, se las sabe todas. Pese al 2-0, no quiso dejar nada sin atar. En cuanto vio que el marroquí Ayoub corría riesgo de ganarse una segunda amarilla, lo mandó al banquillo. Le dio igual que fuera en el minuto 36. El mejor dato para ver cómo el Castilla estaba siendo superado en todas las facetas es que su primera gran ocasión no se contabilizó hasta el 48’, cuando Seoane no acertó a sentenciar a Basilio estando el guardameta vencido.

Pero los canteranos de Valdebebas no sabían cómo ponerle una mordaza a Pichín, Chiki y Carlitos. Éste último le dio a Dani Martínez el 3-0, que pudo haber llegado antes si Brea Peón no hubiera anulado un gol legal de Vicente en el 53’ por fuera de juego.

Con todo, el Rayo Majadahonda hasta se lanzó a por más, por más que el césped fuera ya un desastre. Síntoma de que este equipo va fuerte. Y de que al Castilla, impotente, aún le quedan bastantes detalles por pulir si quiere considerarse un aspirante solvente al ascenso. Seoane fue el único que se salvó en Majadahonda. Campuzano fue un desastre, sigue el misterio en torno a la suplencia perpetua de Dani Gómez, aunque el alcorconero siga a lo suyo, marcar goles. Como el que maquilló el marcador en el minuto 88.