Ocho días restan este viernes para que inicie el Espanyol la Liga ante el Sevilla, un periodo que se estima corto para que Edinaldo Gomes ‘Naldo’ adquiera a tiempo los conceptos y automatismos necesarios (el ritmo, teóricamente, ya lo tiene pese a no haber gozado de minutos en el Krasnodar) para ser de la partida en el Sánchez Pizjuán. Pero la mejor garantía del central es Quique Sánchez Flores. Y viceversa.
El ahora entrenador del Espanyol se hizo cargo del Getafe en enero de 2015, cuando Naldo llevaba media temporada en el club azulón, y aunque su estancia en el Coliseum fue breve, dio al brasileño todos los minutos posibles al brasileño en Liga: 630’. Jugó completas las siete jornadas en las que estuvo en el banquillo Quique, quien también le alineó en su debut, en la Copa ante el Almería, y le dio descanso en otros tres encuentros posteriores del torneo del KO. Si con él disputó de titular el 100% de las jornadas, con otros técnicos esa temporada también fue importante, aunque no a ese nivel: alcanzó el 67 por ciento (21 sobre 31 posibles).
La casualidad quiso que el último partido de Naldo y Quique juntos fuera un Getafe-Espanyol, un 2-1, el 20 de febrero de 2015, que incluyó un tanto de Álvaro Vázquez como azulón. Ahora se reencontrarán en el otro bando.
