Amaya, único superviviente del frustrado ascenso en Ipurua
Ipurua trae muchos recuerdos al Rayo. El Eibar frustró el ascenso vallecano a Segunda en el playoff de 2007. De aquel equipo sólo queda Amaya.
Hay instantes que quedan grabados a fuego: Ipurua, 24-06-2007. Tras tres temporadas en Segunda B, el Rayo se jugaba el ascenso y llevaba ventaja (1-0) de Vallecas. Más de 800 aficionados viajaron a Eibar, arropando al autobús del equipo en su camino al estadio. Toda la plantilla estuvo allí, incluido el sancionado Piti. Ni Apelación ni el CEDD posibilitaron que el catalán (anotó en todos los partidos de playoff, ante Portuense y la ida contra los armeros) jugara. Hasta entonces, los conjuntos de Mel nunca habían caído en Ipurua, que se quedó pequeño, pero tres minutos y dos goles de Alaña y Eneko Romo truncaron el sueño. Los hinchas invadieron el campo: los locales para celebrar, los visitantes para consolar a sus jugadores. Aquellas lágrimas de Míchel (actual director del área de metodología) fueron las del rayismo.
Años después, en la 08-09, se produjo el reencuentro en Segunda y Piti se sacó la espina marcando el 0-1. La pasada temporada, ya en Primera, el Rayo volvió a ganar allí (1-2), pero Amaya fue baja tras haber visto cinco amarillas. Ahora, cumplida su sanción de tres duelos podría regresar. Es el único superviviente de la actual plantilla.