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fútbol | inglaterra

La decisión sobre la venta del Liverpool, en la mañana del miércoles

Si no se aprueba el acuerdo con NESV, entrará de lleno el multimillonario Peter Lim con una oferta estruendosa. Hicks y Gillett, que están torpedeando la venta al grupo propietario de Boston Red Sox, hablan de un tercer grupo interesado en el club de Anfield.

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<strong>BROUGHTON QUIERE CERRAR LA VENTA A NEVS.</strong>

Mañana miércoles a partir de las 9:30 de la mañana, el tribunal supermo decidirá el futuro del Liverpool. El anuncio de la decisión mantiene en vilo al club de Anfield después de que hoy martes las partes implicadas hayan expresado sus correspondientes posturas en los tribunales.

El RBS, Royal Bank de Escocia, está haciendo fuerza para imponer su criterio como principal acreedor del club y conseguir de este modo qeu se haga definitivamente oficial la venta a NESV (New England Sports Ventures), una operación promovida por el presidente Broughton pero a la que se oponen los hasta ahora dueños Hicks y Gillett, que consideran que deprecia el valor del Liverpool. RBS ha contraatacado en las últimas horas acusando a Hicks y Gillett de romper los acuerdos que permitieron su entrada en el club mediante su intento de forzar cambios en la estructura jerárquica de las oficinas de Anfield.

Si el juzgado rechaza la operación con NESV, cifrada en unos 300 millones de libras, entrará en juego el multimillonario asiático Peter Lim, en su día desplazado por el grupo americano en la carrera pero de nuevo de lleno en la puja: si hay un resquicio legal, irrumpirá con una oferta de 320 millones de libras, otros 40 para reforzar el equipo y la garantía de poner todo el dinero de su bolsillo sin endeudar todavía más a un club que vive horas muy complicadas en lo económico y también en lo deportivo.

Hicks y Gillett, además, hablan de una tercera oferta del grupo Mill Financial, que sanearía el club e inyectaría más de 100 millones de libras para la construcción de un nuevo estadio. Pero todo está parado en función de la decisión judicial sobre la validez del acuerdo alcanzado por el presidente Martin Broughton y NESV, grupo propietario de los Boston Red Sox.