El club Palmeiras brasileño anunció hoy que adoptará varias medidas para proteger a sus jugadores tras la agresión de que fue víctima el martes el atacante Wagner Love, atacado por miembros de una barra organizada insatisfechos con las últimas actuaciones del conjunto.

Las medidas preventivas fueron anunciadas por el vicedirector futbolístico del Palmeiras, Gilberto Cipullo, y se extenderán incluso después del domingo, cuando se disputará la última jornada del Campeonato Brasileño. Los hinchas del Palmeiras vienen dando muestras violentas de su insatisfacción desde hace dos semanas, incluso con el apedreo del autobús utilizado por los jugadores del club.

El descontento obedece a que el Palmeiras, tras liderar por 19 jornadas seguidas el Campeonato Brasileño y haber sido señalado como el favorito para quedarse con el título este año, sufrió algunos traspiés en las últimas dos semanas que lo dejaron en el tercer lugar de la clasificación. Para coronarse campeón brasileño esta año el club tendrá que vencer al Botafogo el próximo domingo en Río de Janeiro y esperar por resultados negativos del Flamengo, que lidera la clasificación con dos puntos de ventaja, y el Internacional, segundo en la clasificación con los mismos puntos del Palmeiras pero mejor saldo de goles.

"Vamos a conversar con la policía debido a que todas las agresiones tienen que ser investigadas pero también vamos a ofrecerles seguridad a los jugadores con escoltas privados", afirmó Cipullo en declaraciones a periodistas.

Las medidas fueron anunciadas después de que Wagner Love, una de las principales contrataciones del Palmeiras este año y ex jugador del CSKA de Rusia, fuera agredido por tres hombres que lo identificaron en una agencia bancaria y comenzaron a insultarlo por su supuesto mal desempeño. Los hinchas insatisfechos siguieron al delantero hasta su vehículo y le impidieron salir del local, lo que generó una confusión con puños y patadas que tuvo que ser controlada por la policía y acabó con el arresto de los tres agresores.

"Los agresores fueron detenidos y estamos esperando más informaciones para conocer cuál es su vínculo con las barras organizadas. La dirección del Palmeiras estará atenta al caso hasta el final y exigirá una punición", afirmó el dirigente. Cipullo amenazó con la ruptura de relaciones entre el club y la barra organizada en caso de que se confirme que los agresores son integrantes de la misma.

"Esa actitud (la presión violenta de los hinchas) perjudica al equipo debido a que los jugadores no se sienten a gusto", agregó el dirigente al admitir que el Palmeiras teme un éxodo de varios de sus jugadores después del Campeonato Brasileño. "Tenemos 15 millones de hinchas que nos apoyan, que aún creen en el título y en la clasificación a la Libertadores, y no podemos permitir que una pequeña facción se imponga", afirmó.