Del Bosque intentó frenar en la previa del encuentro ante Irak, la euforia que rodea cada partido de una selección que lleva 33 partidos sin conocer la derrota.

"España ha sido tradicionalmente muy pesimista. Ahora hemos pasado a un optimismo exagerado. Estamos hablando de ganar el Mundial y todavía no estamos clasificados. Debemos tener calma los que estamos alrededor de los jugadores y ser sumamente sensatos", advirtió.

El seleccionador ve a sus jugadores "con los pies en el suelo a pesar del éxito de la pasada Eurocopa", y aseguró que la clave del éxito es seguir manteniendo "la normalidad".

"El récord de partidos consecutivos sin perder es un estimulo más para nuestra selección. Ponerse a la altura de Brasil es bueno para todos, aunque el principal objetivo es meternos en semifinales", añadió.

Del Bosque admitió que va a realizar cambios en su equipo titular. "Tenemos veinte jugadores de campo disponibles para jugar en cualquier momento. Vamos a hacer algún cambio, no lo oculto".

Y avisó de que Irak "no va a dejar jugar cómodamente", como si hizo Nueva Zelanda en el estreno, tras elogiar el nivel que se ha visto en la primera jornada de la Copa Confederaciones.

"La primera jornada de los dos grupos ha prestigiado la Copa Confederaciones. Los dos partidos de ayer fueron excelentes, de gran competencia con Egipto y Estados Unidos brillando ante Brasil e Italia. Va a ser un gran campeonato"

Por último, mandó un mensaje de tranquilidad por el estado de David Villa, jugador que por las negociaciones con el Real Madrid se le ve algo ausente. Es el único internacional que no dialoga con los medios de comunicación cuando acaban los entrenamientos.

"Veo bien a Villa. No hay ningún problema. Imagino que en su fuero interno estará preocupado por su futuro, pero estamos en un grupo envidiable en el que no hay problemas".