"Si jugáramos igual en las dos vueltas, campeones"

No se habían visto en otra parecida. Juan Arango, David Navarro y Cléber Santana vivieron ayer una experiencia novedosa e impactante. Están acostumbrados a responder las preguntas de periodistas, visitar un colegio, una peña o un hospital, pero esta vez se sentaron para responder a los reclusos del centro penitenciario de Palma. Los jugadores acudieron acompañados por el director de Comunicación, Matías Rebassa, y los consejeros de asuntos sociales y deportes, Fina Santiago y Mateo Cañellas, así como por el personal de la Fundación que apadrina dos equipos de fútbol sala de internos, masculino y femenino.

Algo descolocados al principio, pero con ganas de hacer pasar un buen rato a los internos que llenaban el salón de actos, los futbolistas del Mallorca fueron contestando preguntas de todo tipo, algunas sobre fútbol, pero otras también de índole personal.Pero si algo quedó claro es que hay reclusos que siguen atentamente el fútbol y especialmente el Mallorca. "¿Por qué no ha comprado Davidson el club?" pregunta uno. Sonrisas de los jugadores, y Matías Rebasa sale al quite: "Es algo que debe contestar el presidente". "¿Pero os afecta no saber qué va a pasar en el club?". "Procuramos que no porque no pensamos en eso. Si estuviéramos pendientes, tal vez sí", reconoce Arango, sorprendentemente el más dicharachero con los reclusos.

Error del pasado. Pregunta directa a Navarro: "¿Has pensado dedicarte al boxeo?", en referencia a su affaire con Burdisso. Risas de todos y el central responde sincero: "Cometí un error y pagué por ello, no se puede huir del juego limpio". Más preguntas: "¿Por qué siempre empezáis tan mal y lo dejáis para la segunda vuelta?". Contesta Arango: "Si jugáramos igual en la primera vuelta seríamos campeones".

Otra pregunta crítica: "¿Y por qué os tienen que marcar siempre primero? En este ocasión es Navarro el que lleva la voz cantante: "Nos gusta hacer sufrir a la afición". "¿Os gusta Manzano ?", otra pregunta frontal. Los tres responden afirmativamente, claro. "¿Y cuándo habrá una alineación fija?". La respuesta, en esta ocasión, se quedó en el aire.

El director de la prisión, Manuel Avilés, recordó la anécdota de Navarro con Burdisso para pedir a los reclusos que miren adelante: "Todos nos podemos equivocar, pero lo importante es levantarse".