El partido 1.200 del Cádiz en Segunda, y 600 en casa dentro de la misma categoría, no ha podido llegar en un momento más caliente de la Liga. Los habitantes de la zona de ascenso y también la de descenso estarán muy pendientes de lo que ocurra en el Carranza, porque una victoria de la Real Sociedad apretaría mucho las cosas tanto por arriba como por abajo.

La derrota ayer del Málaga y el triunfo del Sporting hacen que si los de Juanma Lillo amarran hoy el triunfo, se quedarán a dos escasos puntos del tercero, ahora con costasoleños y asturianos empatados. Las consecuencias serían todavía mayores, porque el 'Submarino' podría ver reducida su ventaja sobre el abismo a sólo tres puntos, si Albacete y Alavés empatan. Como ven, un auténtico drama en esta recta final, en donde los transistores de muchas ciudades de España van a echar humo.

Las sensaciones, sin embargo, no son malas en Cádiz. Pese a que los de Raúl Procopio han perdido en los dos últimos partidos, el equipo no ha dado mala imagen y las bajas con las que acude el conjunto 'txuri urdin' son importantes. La amenaza realista llega con De Cerio y con la eficacia de Martí, mientras que en el Cádiz, ahí estarán Bezares, un ex compañero del sevillista, y Fleurquin para taponar cualquier pase. Natalio quiere fulminar las dudas que se ciernen sobre su rendimiento con goles. Junto a Dani, tendrá la responsabilidad de marcar esos tantos que le hacen falta al Cádiz para ahuyentar los miedos. Para ello, los amarillos han pedido durante la semana que la afición se entregue, algo que, dicho sea de paso, nunca han dejado de hacer.

Para esta enésima final en Carranza, Procopio recupera a Abraham Paz, cuya participación junto a De la Cuesta en el eje de la zaga se antoja vital para parar a De Cerio. Por su parte, Lillo asume el choque con las ausencias de Garitano y de Aranburu. Elustondo y Larrea serán sus sustitutos, en un partido donde la clave estará en la fortaleza del centro del campo de ambos equipos.

Juanma Lillo: "Ningún resultado será definitivo"

"Ningún resultado de esta jornada, ni para bien ni para mal, va a ser definitivo, pero nosotros tenemos la obligación de ganar, pase lo que pase en otros campos. Que no esten ni Garitano ni Aranburu no puede servir de excusa. Sé dónde estoy y sé lo que quiero y ahora estoy en la Real, y lo que quiero es echarle una mano para subir a Primera".

Raúl Procopio: "De ganar, daremos un gran paso"

"El equipo está metido y auguro que será un buen resultado. Si ganamos daríamos un paso de gigante y como lo sabemos no queda otra que salir y darlo todo para dejar casi finiquitada esa permanencia. La idea es intentar mantener el bloque. La grada de Carranza es soberana y lo único que le pido es lo que hace habitualmente: animar a su equipo".