España muestra su potencial ante Francia

Amistoso | España Sub 21 2 - Francia Sub 21 0

España muestra su potencial ante Francia

Tras el descanso, ambos seleccionadores aprovecharon para realizar tres cambios por cada bando pero fue a España a la que le sentó mejor la entrada de nuevos jugadores, ya que a los tres minutos de la reanudación anotaba el 2-0, tras un gol en propia puerta de Dabo al tratar de impedir que rematara Capel.

España demostró su potencial ante Francia, a la que derrotó por un claro 2-0, en un choque igualado en su primera media hora, pero que poco a poco fue decantándose de lado del combinado que dirige Iñaki Sáez.

El partido tuvo poco de amistoso en sus comienzos ya que ambas selecciones se emplearon con mucha contundencia. El combinado galo, aprovechando el poderío físico de la mayor parte de sus jugadores, impusieron una fuerte presión en la medular para impedir maniobrar a España, mientras que buscaba la rapidez de sus puntas para tratar de sorprender a la zaga española.

De esta forma, pudo llegar el gol a los seis minutos de juego, en una incorporación del lateral N''Zogbia, que fue bien despejado por el meta español Roberto. Los pupilos de Iñaki Sáez cargaban mucho su juego ofensivo por la banda izquierda, aprovechando la rapidez y calidad del sevillista Diego Capel, quien tuvo una dura pugna con el lateral Dabo.

El partido transitaba hacia el descanso sin grandes sobresaltos cuando Granero se sacó un excelente pase al hueco para habilitar a Sisi, quien no desaprovechó el mano a mano con el meta galo para marcar el primer tanto del encuentro. En los últimos diez minutos, España tuvo mayor presencia ofensiva pero el tanteador no sufriría variaciones.

Muchos cambios

Tras el descanso, ambos seleccionadores aprovecharon para realizar tres cambios por cada bando pero fue a España a la que le sentó mejor la entrada de nuevos jugadores, ya que a los tres minutos de la reanudación anotaba el 2-0, tras un gol en propia puerta de Dabo al tratar de impedir que rematara Capel.

España jugó entonces sus mejores minutos, al ritmo que marcaba Granero, ante un rival desorientado. Las llegadas era más claras para el combinado nacional, aunque la ruleta de cambios rompió el ritmo del partido y España perdió su fluidez de juego.