Waitakere UTD. Tres años y ya en todo un mundial
Tres años de vida contemplan al Waitakere United, club neocelandés fundado en 2004 que ya ha ganado la O-League (Champions oceánica) y sucede al Auckland en el Mundialito. Sus estrellas: el central Hay, capitán de Nueva Zelanda y ex jugador de la Premier, y Menapi, delantero de las Islas Salomón.
Sepahan. Dirigido por la Clase de Navidkia
Procedente de la ciudad de Esfahan, el Sepahan fue el primer club iraní en acabar con el dominio de los equipos de Teherán y este año se clasificó incluso para la final de la AFC. Está dirigido por el cerebro Navidkia, que llegó a jugar en el Bochum alemán, y tiene en su ataque a la estrella iraquí Emad Mohammed.
Etoile du Sahel. El verdugo inesperado del Al-Alhy
Nadie esperaba que este equipo tunecino lograra acabar con la hegemonía de los egipcios del Al-Ahly, que habían ganado cinco Champions africanas y jugaron contra el Sahel su tercera final consecutiva. La irrupción del casi adolescente Chermiti, la sensación atacante del torneo, permitió esta sorpresa.
Urawa Red Diamond. Pierde a Robson Ponte, pero sigue con el pichichi Washington y Nagai
El Urawa Red Diamonds, anfitrión del torneo, llega a la cita tras sufrir un gran palo moral, pues Kashima Antlers le arrebató el título de campeón japonés hace sólo unos días. También arrastra una baja de peso: se ha lesionado para varios meses el ala brasileño Robson Ponte, ex jugador del Leverkusen alemán y una de sus principales armas ofensivas. Un Urawa que se ha reforzado con el ex Feyenoord Shinji Ono, aunque no ha jugado aún mucho, y que tiene arriba pólvora con Washington, pichichi de la J-League, y con Nagai, elegido mejor delantero de la Liga de Campeones asiática.
Pachuca. Los Tuzos, nuevos ricos aztecas
Bajo la mano del técnico Meza, el Pachuca se ha colado en la casi inabordable hegemonía de los cuatro grandes mexicanos: América, Guadalajara, Cruz Azul y Pumas. Tanto como lograr la Copa CONCACAF. Ya sin Mosquera (el colombiano que fichó el Sevilla), siguen teniendo en la defensa su línea más fiable.
Boca Juniors. El Mundialito como consolación
Perdió el Apertura por la pujanza de Lanús, pero el equipo de la Boca vuelve al que muchos dicen es su refugio, pues junto a Milán y Real Madrid es el único equipo que ha levantado tres veces la intercontinental. Finalmente, el recién fichado Riquelme no podrá ser de la partida, aunque su espíritu deambulará por Japón como aquella tarde nipona de 2000 en la que la pareja formada por Román y Palermo sorprendió al Real Madrid. Siguen marchándose jugadores de la inagotable cantera xeneize, surgen otros como los emergentes Maidana y Banega y perviven en su peligrosa delantera una gloria que viene (Palermo) y otra que debe ir (Palacio).
Milán. Kaká y a por la hegemonía
El Milán ha ganado tres Intercontinentales, pero el torneo se le resiste porque ha perdido otras tres finales desde que lograra el último título, en 1990. El equipo rossonero, como ocurrió el año pasado, no carbura bien en la Serie A, donde marcha octavo con un partido menos, pero sigue maravillando cuando sale más allá de la frontera italiana. Ha ganado ya su grupo de Champions y llega a Japón exhibiendo el recién estrenado Balón de Oro de Kaká. La duda de Ronaldo, que ha viajado pero sigue con problemas físicos, sigue afectando la tranquilidad de Berlusconi y los medios milanistas.
