Los Angeles Galaxy derrotó por 4-1 al Wellington Phoenix de Nueva Zelanda, con un gol de penalti de David Beckham, en el encuentro amistoso disputado en esta ciudad ante 31.853 aficionados, récord de público para un encuentro internacional de cualquier deporte en la historia de esta ciudad.

Fue la despedida de Oceanía del Galaxy con su máxima estrella, el ingles David Beckham, que el pasado martes en Sydney había sido goleado, 5-3, por el Sydney fútbol Club ante más de los 80.000 espectadores que se dieron cita en el estadio Olímpico de la mencionada ciudad.

El centrocampista australiano Ross Aloisi abrió la cuenta para Wellington a los 10 minutos de juego, pero cinco más tarde igualó para los visitantes Clint Mathis.

Remontada

Los estadounidenses se pusieron en ventaja antes de finalizar el primer tiempo con tanto de Landon Donovan, y a poco de comenzada la segunda parte el hondureño Carlos Pavón marcó el tercero.

A los 31 minutos del complemento, después de que Pavon fuera derribado dentro del área local, Beckham cerró el marcador mediante la ejecución de un penalti. Fue el segundo gol de Beckham durante la breve gira por Oceanía. El primero lo señaló ante Sydney mediante una falta desde 25 metros a la "manera Beckham".

El viernes previo al partido, alrededor de 15.000 escolares y unos 5.000 adultos presenciaron el entrenamiento de Galaxy, en el que el ex capitán de la selección inglesa fue la mayor atracción.

Beckham le manifestó a la prensa local que le había sorprendido el numero de aficionados presentes en el entrenamiento, y que no recordaba haberlo hecho ante tantos espectadores durante su carrera.