Levante y Getafe empataron en un partido en el que el conjunto valenciano se adelantó por medio de Riga a los tres minutos y gozó de numerosas ocasiones que no supo concretar durante el primer tramo, pero en el que perdió fuelle y cedió el empate en un error de Molina que aprovechó Belenguer.

Ya con el empate a uno en el marcador, el Levante logró adelantarse de nuevo por medio de Descarga pero el colegiado Delgado Ferreiro anuló el gol en una polémica decisión, por lo que el regreso del técnico alemán Bernd Schuster al que fue su estadio hace dos temporadas acabó finalmente en un empate que deja al equipo valenciano anclado en la zona baja.

El Levante saltó al campo después de una convulsa semana, que había incluido una pelea entre el meta argentino Cavallero y Riga.

El ghanés acumula más polémicas que goles esta campaña y, tras este último incidente, se había mostrado convencido de que estaba a punto de cambiar su suerte de cara a la portería y de que sus goles iban a conducir al equipo valenciano la permanencia.

Tres minutos le bastaron para confirmar, al menos, la recuperación de su olfato goleador. Abel Resino le situó como media punta, posición que él siempre ha reclamado, y Riga inauguró el marcador al aprovechar el rechace de Abondanzieri tras un buen remate de Reggi tras el saque de un córner.

El gol fue la pócima mágica que necesitaba el Levante, que durante veinte minutos pasó por encima del Getafe pero no logró sentenciar el choque. Ni acertó Reggi en dos nuevos remates cerca del área pequeña, ni lo hizo Kapo en otro remate de cabeza y tras una larga cabalgada, que recordó al ya famoso gol de Leo Messi ante el equipo madrileño esta misma semana.

El Getafe despertó

Celestini y Casquero despertaron al Getafe tras el mazazo inicial. Los dos medio centros empezaron a estirar a su equipo por la banda de Nacho y tras un par de llegadas abortadas por caer en fuera de juego, Güiza tuvo varias ocasiones, una de ellas clarísima que Molina acertó a sacar con el pie izquierdo.

El portero valenciano salvó a su equipo en el tramo final del primer tiempo pero le condenó al empate en el inicio del segundo. Con el partido dormido, una mala salida de Molina dejó el balón en los pies de Belenguer que sólo tuvo que empujarlo para llevar las tablas al marcador.

Con el empate, el Getafe rompió el partido, se dio cuenta de que el triunfo estaba al alcance de la mano y se lanzó a por él, pero al hacerlo, dejó su espalda desguarnecida y, cuando el Levante parecía hundido, tras una llegada por la banda izquierda, Kapo asistió con la cabeza a Descarga quien, también con la testa, logró el gol.

Gol anulado local

La alegría duró pocos segundos, los que tardó Delgado Ferreiro en anularlo por una falta discutidísima por los jugadores y la afición local.

Las protestas a la labor del colegiado y los cambios de Abel, que al retirar a Riga y Reggi dejó durante unos minutos sin referencia ofensiva a su equipo, neutralizaron la reacción del equipo local, que no abandona la zona peligrosa de la clasificación y con la continuidad del técnico cuestionada