Capello se está planteando darle la titularidad a Diego López este miércoles ante el Anderlecht en el Trofeo Bernabéu y dejar a Casillas en el banquillo. El italiano está encantado con su segundo portero. Le ha agradado su manera de trabajar tanto en Austria, como en Estados Unidos y en Valdebebas. Capello le dio una oportunidad el sábado, en la final de consolación del Carranza, y la actuación de Diego le gustó, por lo que el entrenador medita que ocupe él la portería en el último amistoso de la pretemporada del Madrid (el primero en casa).
Tanto a Capello como a sus ayudantes, lo que más les gusta de Diego López es su envergadura. El técnico siempre ha tenido en sus equipos a porteros de estaturas más que considerables y el 1,96 del lucense (frente al 1,85 de Iker) aporta mucha seguridad en la meta. También les han convencido sus reflejos, que posee un potente golpeo del balón y que se maneja muy bien con los dos pies. Diego López podría tener el miércoles una oportunidad de oro e incluso, si realiza una buena actuación, complicarle las cosas a Casillas para el primer encuentro oficial de la temporada, el domingo ante el Villarreal en el estreno de la Liga.
El Trofeo Ramón de Carranza ha hecho reflexionar al técnico sobre la portería del Madrid. Los tres goles que encajó Iker en el primer partido contra el Betis el viernes (3-3), que se perdió finalmente en la tanda de penaltis, hicieron que Capello le diera la alternativa el sábado a Diego López. El canterano cumplió y ahora puede tener su recompensa.
El cuerpo técnico del Madrid está algo preocupado por Iker. Últimamente le han visto bastante más serio, callado, tímido e introvertido que de costumbre y les gustaría ver a un Casillas más alegre, más parecido al que todos se han acostumbrado a ver durante los últimos años, tanto en el trabajo diario del Real Madrid como en el de la Selección.
Pruebas.
Los jugadores madridistas vuelven hoy al trabajo y Fabio Capello comprobará personalmente cómo se encuentran los dos porteros, tanto física como anímicamente. Los últimos ensayos que van a realizar durante hoy y mañana serán muy importantes para la decisión final que tome el técnico. Pase lo que pase, Diego López aún tiene mucho trabajo por delante, ya que tanto el entrenador como sus colaboradores son plenamente conscientes de que el segundo portero parte con desventaja, sobre todo en lo que a experiencia se refiere. Solamente ha jugado dos partidos en Liga, tres en Copa del Rey (iba a ser el guardameta titular de esta competición durante toda la temporada pasada, pero se lesionó en San Mamés y una rotura fibrilar le tuvo seis semanas de baja) y uno en la Champions League.
