La no convocatoria de Oleguer ha impedido despejar la duda de si, tal y como se había rumoreado, el central catalán tenía pensado rechazar la posible llamada de Luis Aragonés. Quien les aseguro que está deseoso de verse incluido en la lista del seleccionador nacional es Víctor Valdés. De hecho, el portero del Barça empieza a comerse el coco pensando qué más tiene que hacer para vestir la camiseta de España. Su sistemática exclusión es una injusticia. Sin restar méritos a Reina, otro meritorio guardameta de quien Luis también parece haberse olvidado, Víctor Valdés lleva toda la temporada haciendo méritos suficientes para ser cuando menos convocado y una vez ahí disputarle la titularidad al incuestionable Casillas.

El cancerbero del Barça suma ya cuatro partidos sin encajar un gol y ha batido su propio récord al mantenerse imbatido durante 406 minutos. Sus números hablan por sí solos: 17 goles en 28 encuentros, con una media de 0,60 por partido. Al igual que sucede con Casillas en el Real Madrid, el Barça le debe muchos puntos a Valdés. Sin ser tan exageradas en sus exhibiciones como Iker, Víctor se ha convertido en el mejor salvoconducto para que el Barça pueda desplegar su fútbol netamente ofensivo. P.D. A quienes no leyeran ayer la entrevista de Tomás Guasch a Velázquez les invito a que lo hagan; a quienes lo hicieron, les aconsejo que no olviden las reflexiones del madridista. No se pueden decir tantas verdades en tan poco espacio.