"Voy a preparar el partido como si se fuese a jugar. No quiero que entre los jugadores haya la psicosis de que al final no se jugará, porque eso se puede pagar caro. Espera.- Veremos por la mañana cómo está el campo, no quiero aventurar nada. Desde luego, si nieva como dicen y está todo como ahora he visto una de las áreas, lo veo muy difícil. En algunas zonas está muy duro, helado, y en otras, blando, está cayendo la nieve y se puede hasta formar barro. Los principales damnificados serán los porteros, cada balón en el área será un riesgo. Pero será complicado para todos. Secreto.- Todavía no he decidido el equipo y tampoco voy a dar pistas al rival, porque yo desconozco sus planes. La llegada de la afición es un motivo más de presión y de alegría".