VOLCÁN EN LA PALMA

Entre el miedo y la curiosidad en La Palma: "Unos huyendo del peligro y otros yendo hacia él"

Las carreteras de La Palma son un ir y venir de vehículos en las últimas horas. Unos, los que escapan del fuego; otros, los que buscan inmortalizar el volcán.

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Entre el miedo y la curiosidad en La Palma: "Unos huyendo del peligro y otros yendo hacia él"

El lunes a última hora de la noche, una nueva boca en el volcán Cumbre Vieja sorprendía a los vecinos de la isla. Con ella se elevaban a nueve bocas y con ello se hizo necesaria una evacuación de emergencia la población de Tacande, un barrio del municipio de El Paso.

En total son ya cerca de 5.500 personas desalojadas de sus casas, muchas de ellas ya devoradas por la lava que avanza sin parar. Una lava que, tras haber reducido su velocidad, se espera que llegue hoy al mar. Y mientras muchos tienen que dejar sus viviendas, otros se acercan lo máximo que pueden al volcán para inmortalizar el momento.

Durante el día de ayer, la principal vía de comunicación de la isla de La Palma contaba con dos largas filas de coches: los que escapaban del fuego y los curiosos que querían un recuerdo de la lava, algo que no ocurría desde hace 50 años, cuando el volcán Teneguía entró en erupción.

Prohibición de circular

Todo ello, a pesar de los aviso de los servicios de emergencia. A última hora del lunes, el Cabildo de la isla anunciaba la prohibición de circular por la LP-3 a la altura de El Paso. "Se sancionará a las personas que transiten por la zona sin que sea estrictamente necesario", advertían.

Igualmente, desde la Guardia Civil informaron del resto de carreteras cortadas al tráfico por el peligro derivado de la lava. Mientras, en otras vías los coches de los curiosos se agolpaban en busca de una imagen única y muy poco frecuente. "Unos huyendo del peligro y otros yendo hacia el", apostilla una cajera de la gasolinera de El Paso, en declaraciones recogidas por 20 minutos.